Infancia

Desheredados, un informe sobre la pobreza infantil

Por Paloma Sztrancman2 min

Sociedad14-02-2017

La ONG para la defensa y la promoción de los derechos de la infancia Save the Children ha publicado un informe titulado 'Desherados. Desigualdad infantil, igualdad de oportunidades y políticas públicas en España'. Según el informe, España se encuentra entre los países de la Unión Europea cuyas diferencias entre personas más adineradas y personas pobres son más pronunciadas. Y estas diferencias afectan también a los más pequeños.

Las cifras que aporta el informe estiman que tras la crisis económica, tres de cada diez menores se han empobrecido. Y durante la crisis, las diferencias entre clases establecen que las personas más ricas ganan hasta siete veces más que las personas más empobrecidas, mientras que estas diferencias en otros países en los europeos suponen una media de 5,2 veces.

Andrés Conde, director de Save the Children, denuncia que el sistema fiscal actual no sirve para disminuir la desigualdad y la pobreza. Asimismo, también critica que los impuestos se ceban más con las personas más pobres, afirmando que el Estado no le concede el mismo número de oportunidades a todos. "En España, un niño que nace en un hogar pobre está condenado de por vida a serlo. El Estado no permite que los niños tengan las mismas oportunidades, al contrario, les pone zancadillas a los que peor están". declara Conde. 

Algunos de los ámbitos que se ven más afectados por esta pobreza son la sanidad, la protección social, el empleo y la educación, y los responsables de Save the Children afirman que la pobreza en la infancia es mucho peor ya que "las consecuencias son irreversibles: un mal estado de salud cuando se es menor o una carencia en los estudios, perseguirán a la persona durante toda su vida. En el futuro, lo más seguro, es que acabe necesitando el amparo del Estado".

En el caso del empleo, la destrucción de muchos puestos de trabajo como consecuencia de la crisis ha afectado a un gran número de familias. Las familias afectadas subsisten principalmente a base de trabajos temporales y el problema de los hogares en los que ningún miembro de la familia trabaja afecta a unos 800.000 menores. Respecto a vivienda, se ha tenido en cuenta que bienes como la electricidad y el gas han subido de precio y destaca que los niños más pobres viven en hogares que destinan más del 40% de sus recursos a los gastos del hogar.

Otros de los aspectos que se ve perjudicado por la pobreza es la salud. Los menores viven en peores condiciones y adquieren hábitos poco saludables. Eso se suma a otro problema importante, y es que hay servicios sanitarios como el dentista o el oculista que no los cubre el Estado.

El informe finaliza con una serie de propuestas para frenar la desigualdad. En total, son 21 medidas entre las que se incluyen el poder garantizar la protección de los niños y niñas con progenitores en situación de desempleo, aumentar la protección a las familias monoparentales, evitar situaciones de insalubridad debidas al mal estado de las viviendas, aumentar el gasto público en educación, reformar la política de becas o ampliar la cobertura de prótesis, audífonos y gafas para niños y niñas hasta los 18 años.