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Crimen organizado

Detenidas 245 personas en la Unión Europea por tráfico de armas

Por Beatriz Alcántara GilTiempo de lectura2 min
Internacional23-01-2017

La Unión Europea ha vivido este lunes una gran operación policial contra el tráfico de armas y explosivos. Cuerpos policiales de once países europeos han participado en la 'operación Bosphorus', que ha finalizado con la detención de 245 personas y la incautación de casi 650 armas de fuego. En España la Guardia Civil ha llevado a cabo la detención de 46 personas en 18 provincias diferentes.

La 'operación Bosphorus' se ha desarrollado durante varios meses y ha sido liderada por los cuerpos policiales de 11 países miembros de la Unión Europea. 'Bosphorus' se ha saldado con 245 personas detenidas y 664 armas de fuego incautadas, junto a 33.748 cartuchos, silenciadores, granadas de mano y otras piezas claves en las armas de fuego.

La Guardia Civil española ha participado en esta operación con la detención de 46 personas y la incautación de 247 armas de fuego y más de 23.000 cartuchos. De esta forma la Guardia Civil ha desarticulado cuatro talleres clandestinos, donde los detenidos llevaban a cabo la transformación de armas y la fabricación de munición; dos puntos de venta ilegal a través de internet y dos plantaciones de cultivo de marihuana que contenían más de 270 plantas.

La 'operación Bosphorus' se ha desarrollado en 18 provincias españolas según ha afirmado la Dirección General de la Guardia Civil. Sevilla, Barcelona, Albacete, Bizkaia, Madrid, Murcia, Granada, Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga, Almería, Huesca, Alicante, Tarragona, Zaragoza, Badajoz y A Coruña han sido las provincias donde han tenido lugar las 46 detenciones.

El funcionamiento de esta red de tráfico de armas consistía en adquirir de forma masiva armas detonadoras en países del Este de Europa. Tras acceder a ellas, los detenidos las manipulaban y las convertían en armas totalmente operativas que podían realizar fuego real y disparar munición con proyectil. La Guardia Civil ha querido destacar que la importante operación por parte de los cuerpos policiales europeos ha impedido que estas armas manipuladas llegasen al mercado negro, evitando así que las mismas fueran utilizadas para cometer delitos o hubiesen sido desviadas hacia cédulas yihadistas.

La Oficina Europea de Policía (Europol) ha sido el órgano encargado de liderar esta operación contra el tráfico de armas en la que han participado otros diez países: Grecia, Bélgica, Holanda, Bulgaria, Reino Unido, Chipre, Polonia, Finlandia, Suecia y Rumanía.