Periodismo
La libertad de prensa se resiente durante el 2015
Por Luis Lautenschlaeger Feijóo
3 min
Comunicación28-04-2016
La libertad de prensa se vio gravemente perjudicada durante el 2015. Un informe publicado este jueves por la organización Freedom House, ha mostrado una notable pérdida de la misma, principalmente en países de Oriente Próximo, latinoamericanos y europeos. De esta forma, tan solo el 14% de la población recibe una información libre, mientras que el 46% se encuentra en un escenario donde las presiones, las amenazas y los intereses políticos limitan y coartan el trabajo de los periodistas.
Malas noticias para la profesión periodística. Según un informe publicado este jueves por la organización Freedom House, la libertad de prensa ha caído a nivel global y atraviesa su peor momento de los últimos doce años. Tantos países de Oriente como europeos se han visto afectados por presiones, amenazas y leyes que han coartado la libertad de prensa.
De esta forma, el documento publicado este 28 de abril refleja que solo un 14% de la población total tiene una prensa totalmente libre, en un escenario en el que los periodistas están protegidos por los políticos, no hay manipulación de los medios por medio de los gobiernos y la prensa no sufre presiones legales o económicas. En cambio, el 40% de la población mundial solo cuenta con una prensa “parcialmente libre” y en el 46% esta es prácticamente inexistente.
La lista de países en los que menos se respeta dicho derecho y existe una clara censura y control de los medios de comunicación, está encabezada por Bielorrusia, Crimea, Cuba, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Irán, Corea del Norte, Siria, Turkmenistán y Uzbekistán. Sin embargo, la situación en otras muchas naciones se ha resentido notablemente durante el 2015, como es el caso de Bangladesh que ha sufrido una caída de siete puntos. A ella le siguen Turquía y Burundi, con un descenso de seis puntos, Francia, Serbia y Yemen de cinco, y Egipto, Macedonia y Zimbabue de cuatro.
Tal y como asegura la directora de la investigación, Jennifer Dunham, ha condenado la situación, especialmente en países de Oriente Próximo, donde los periodistas se ven obligados a tomar partido en los conflictos y son presionados para posicionarse en uno de los bandos. “La consigna es clara, o estás con nosotros o contra nosotros”, aseguraba. Adicionalmente ha lamentado la situación que atraviesan otros países menos represivos, sobre todo de Europa, en los que se han producido amenazas terroristas y se han aprobado leyes en pos de la seguridad que han perjudicado gravemente a la prensa.
A nivel europeo, España se encuentra en la posición 26, empatada con Francia, Polonia y Letonia, y por detrás de otros países como Alemania, Austria, Suecia, Irlanda, Noruega, Lituania, Chipre, Eslovenia o Malta. El documento condena de forma directa la Ley de Seguridad Ciudadana aprobada el año pasado por el Gobierno de Mariano Rajoy. “Puede poner en peligro el trabajo de los reporteros gráficos y otros que buscan informar al público acerca de los abusos policiales”, señala el informe.
A pesar de estos datos negativos y que muestran la represión existente en muchos lugares del planeta, el estudio resalta también el surgimiento de nuevos grupos de periodistas y blogueros que están luchando contra las dificultades y “arriesgando sus propias vidas” para informar con libertad. Entre ellos destacan el colectivo Raqqa, en Siria, que informa clandestinamente de lo que ocurre en el país, y los periodistas de investigación en países latinoamericanos como México, Brasil o Colombia, donde los altos niveles de criminalidad suponen un verdadero riesgo para los profesionales de la información. Del mismo modo en otras naciones del continente como Venezuela y Ecuador, el principal problema reside en las propias autoridades, que censura la información y la controla, poniendo duras sanciones a aquellos que se oponen a sus normas.
Freedom House es una organización no gubernamental con sede en Washington y con oficinas en más de 12 de países. Durante años su objetivo principal ha sido promocionar la democracia, la libertad política y los derechos humanos, a pesar de que como se ha podido observar en este último informe la situación está empeorando en muchas regiones del mundo.