LEY DE AMNISTÍA DE VENEZUELA
La nueva ley pretende "cerrar heridas políticas o sociales"
Por Jesús Espinosa
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Internacional31-03-2016
El parlamento venezolano ha aprobado la Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional con el objetivo de sacar de las cárceles del país a aquellos presos por sus ideas políticas, aunque de forma “oficial” son acusados por otros delitos. El más famoso es el opositor Leopoldo López, en la cárcel por, según la justicia del país, intentar atentar contra el Gobierno.
Los detalles de la ley son muchos y muy variados. Es importante resaltar que en sus primeras líneas dice que se inspira en el Papa Francisco. Se trata de una Ley que tiene como objetivo “poner fin a la persecución y al castigo penal respecto a determinados delitos con la finalidad de cerrar heridas políticas o sociales”. Especifica además que los delitos que amnistiarán serán los cometidos “desde el 1 de enero de 1999 hasta la entada en vigor de la Ley”.
“Cuando se hayan cometido o puedan haberse cometido por la participación en manifestaciones o protestas o en reuniones que hayan tenido una finalidad política”, prosigue la Ley. Especifica además aquellos “dirigidos a cambiar el orden institucional o el Gobierno establecido, acompañados o no de acciones consideradas conspirativas”. Incluso llega a especifica tales delitos como “la instigación a la desobediencia de las leyes, instigación al odio y apología del delito”.
La ley establece rotundamente que todas las personas que han cometido dichos delitos dejan de ser inmediatamente sancionados o penados puesto que se cometieron, dice la ley, “con una finalidad política o un móvil político” mediante “protestas, manifestaciones o reuniones en lugares públicos o privados". De hecho también se llega a especificar que se amnistía “el delito de tráfico de drogas de menor cuantía” se han producido “en campamentos o cualquier tipo de reunión de manifestantes” de la oposición.
Por otro lado, la Ley establece que los procesos penales que se encuentren en estos momentos en una fase preparatoria o de instrucción, en fase intermedia o de juicio serán sobreseídos. Al igual, claro está, que los casos con una condena en firme.
“De existir una sentencia condenatoria definitivamente firme referida a los delitos comprendidos por la amnistía, el juez de ejecución respectivo declarará la extinción de la pena mediante auto, en un lapso no mayor de tres días hábiles contados desde la entrada en vigor de esta ley y ordenará la inmediata libertad plena del respectivo penado”, sentencia la Ley.
Cabe recordar que todavía se deben debatir en distintas comisiones artículo por artículo de la Ley. De hecho, incluso se puede llevar al Tribunal Supremo, que es lo previsible según las palabras de Maduro, para torpedear su aprobación. El Tribunal podría impugnarla, lo que crearía un revuelo importante en la actividad política del país.