Un año después del 11-S el Ibex sigue perdiendo

Por Ana Romero1 min

Economía16-09-2002

No resultó agradable ni fácil hablar de resultados macroeconómicos cuando todavía nadie se podía creer lo que el 11 de septiembre del 2001 estaba ocurriendo en Nueva York. Duro fue hablar de la cantidad de heridos y peor fue enumerar y cifrar la de muertos. Pero no se pudo obviar otra realidad radicalmente diferente, la de las pérdidas materiales.

La Bolsa de Nueva York se mantuvo cerrada durante seis días, y sin la referencia del Wall Street, el mercado europeo, ya de por sí muy conmocionado y sin ganas de hacer negocio, se llevó un gran batacazo. Tras la reapertura del Dow Jones las pérdidas continuaron para todos. No hubo mercado ni valor que cotizara con beneficios algo aceptables. El Ibex35 vivió la peor situación desde hacía veinte años, porque llegó a retroceder hasta un 27 por ciento. Tampoco durante las semanas posteriores al atentado contra el World Trade Center se olvidó lo allí sucedido. En el caso español, cuando el mercado parecía recuperarse algo, volvió a recaer a mediados de octubre, aunque como algo que siempre es imprevisible, la Bolsa pisó el pedal de las ventas y dio un nuevo acelerón que se registró en la primera semana de noviembre. Después volvieron más pérdidas, unas y otras, y a veces semanas de recuperación, pero nada demasiado boyante. Las secuelas del atentado terrorista siguieron vigentes en las Bolsas del mundo, a los cuales se añadieron problemas extra, como la crisis argentina y su contagio a nuestro país. Antes de los ataques en EE.UU, una inminente crisis era palpable desde hacía meses, propiciada principalmente por el aumento del precio del petróleo. Paradójicamente esta semana ha vuelto a pasar algo parecido. Recordar el 11-S durante esta semana también ha sido difícil para las Bolsas. El pasado viernes, el Ibex 35 perdía un 1,76 por ciento y eran los sectores de la banca y de la comunicación los más perjudicados, como ha venido ocurriendo durante los pasados meses.