Siria
Los rebeldes sirios abandonan la última zona de la ciudad de Homs
Por Sonia de la Cal 
1 min
Internacional09-12-2015
Decenas de personas han abandonado a primera hora de este miércoles el distrito de Waer, la última zona de la ciudad siria de Homs controlada por los rebeldes durante más de tres años. La ciudad bautizada como “capital de la revolución” fue el origen de la rebelión contra Bashar al-Assad, actual presidente de Siria. La evacuación de esta área se debe a un acuerdo local de paz al que llegaron el Gobierno sirio y los insurgentes el pasado día 1 de diciembre.
Se estima que alrededor de 350 combatientes y sus familias abandonen el distrito de Waer, durante una tregua que se desarrollará en tres fases, teniendo prioridad las mujeres, los niños y los heridos graves.
El gobernador de Homs, Talal al-Barazi, que se encuentra a la entrada de Waer, ha señalado esta mañana que "la primera fase del acuerdo está siendo implementada". Ésta se llevará a cabo durante una semana en la que los autobuses llevarán a los evacuados a Qalat Al-Madiq, una localidad de la provincia de Hama, al noroeste de Siria y controlada por el llamado Ejército de Conquista, que congrega a Al-Nusra y otros grupos islamistas menores.
Durante la segunda fase, según el gobernador de Homs, se llevará a cabo la reintegración en la sociedad de todos aquellos que estén dispuestos a entregar las armas, aunque quienes tengan condenas pendientes tendrán que cumplirlas. Ya en la tercera y última fase del acuerdo, el distrito de Waer será "limpiado de armas y quedará bajo total control del Gobierno", tal y como ha explicado al-Barazi.
La ONU se encargará de supervisar la aplicación del acuerdo y, tanto ella como la Media Luna Roja siria, facilitarán ayuda humanitaria a los aproximadamente 70.000 civiles que todavía viven en Waer, 230.000 habitantes menos que antes de que comenzase el conflicto sirio.
Este acuerdo local de paz entre el Gobierno sirio y los insurgentes es el segundo al que se llega en la ciudad de Homs. El primero se produjo en mayo de 2014, cuando fueron trasladados de la ciudad 1.400 civiles y 600 rebeldes, para ser conducidos a la periferia norte de la provincia siria.
Por su parte, los diplomáticos que median en el conflicto piensan que este tipo de treguas pueden ser la mejor forma de alcanzar la paz, después de casi cinco años de Guerra Civil en Siria.