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TENTADO CHARLIE HEBDO

Charlie Hebdo, una redacción bajo amenazas constantes

Por Jesús Espinosa Tiempo de lectura3 min
Internacional08-01-2015

Charlie Hebdó se fundó en julio de 1992 como un foco provocador y es un blanco constante de amenazas desde 2006, año en el que comenzó a publicar caricaturas de Mahoma que han indignado al mundo islámico. La redacción vivía asediada. La revista nació como continuación de otra llamada Hara Kiri. Esta última tenía una línea inicial anticlerical y denunciaba el orden burgués, pero buscaba ante todo hacer reír a sus lectores con un humor corrosivo implacable.

En 1970, mezclando el drama en una discoteca en el que murieron 146 personas con la muerte de Charles De Gaulle, el semanario tituló "Baile trágico en Colombey (la localidad donde murió el general): un muerto". El Gobierno prohibió de inmediato la difusión de Hara Kiri. La redacción optó entonces por una nueva fórmula editorial que combinaba cómics con rúbricas parecidas a las de Hara Kiri pero bajo el nuevo título Charlie Hebdo, en referencia a Charlie Brown, el Carlitos de los Peanuts, la famosa tira cómica norteamericana de Charles Schulz. A partir de ese momento, cultivó una línea editorial irreverente desde una óptica de izquierda radical forjada durante la presidencioa de Valéry Giscard d Estaing (centroderecha, 1974-81). En su larga historia le llovieron juicios por difamación. Las demandas de la Iglesia, empresarios, ministros o famosos que eran blanco permanente de sus sátiras terminan por derribar a un semanario que en 1981, año de la elección del socialista François Mitterrand, había perdido muchos lectores. Pasaron 11 años antes de que Charlie Hebdo vuelva a publicarse en 1992. Desde entonces el semanario abrió sus columnas a los mejores dibujantes irreverentes de Francia, de Wolinski a Cabu, muertos ambos en el atentado. El número de 2006 que había reproducido las caricaturas de la prensa danesa había alcanzado un récord de ventas de 400.000 ejemplares. Hasta el día del atentado, el semanario que padecía dificultades financieras, publicaba semanalmente unos 30.000 ejemplares. Bajo amenazas constantes