Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

REFORMA FISCAL

Montoro asegura que la reforma fiscal creará empleo

Por Selene PisabarroTiempo de lectura2 min
Economía01-01-2015

La recién estrenada reforma fiscal del Gobierno ha entrado en vigor este jueves y durante los dos próximos ejercicios, 2015 y 2016, tendrá como objetivo rebajar la presión fiscal hasta el 39%. Desde el organismo internacional, el FMI ha avalado las nuevas medidas aunque asegura que el Gobierno puede mejorar algunos puntos que no ha considerado.

El objetivo principal del Ejecutivo es que la presión fiscal no rebase el umbral del 39% del PIB, es decir, regresar a los niveles de 1998 y 2002, tal y como ha explicado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. El Ministro ha expresado su deseo por que esta reforma genere crecimiento y empleo estable en el tiempo y ha asegurado que los efectos sobre el consumo son inminentes ya que será una de las consecuencias de que mejore la renta de los trabajadores y autónomos. Además, según el Ministro, los ciudadanos podrán ahorrar y de esta manera mejorar su capacidad adquisitiva. Y no sólo esto, ya que las empresas podrán crecer y crear puestos de trabajo y mejorará la situación de los autónomos, que verán una rebaja de su tributación a Hacienda. Sin embargo, la reforma no cuenta con el apoyo de uno de los organismos más importantes: el Fondo Monetario Internacional (FMI). A pesar de que ha calificado de excelente la nueva ley, en julio le dio un tirón de orejas al Gobierno. En especial, ha criticado tres puntos. El primero es que hará caer los ingresos en vez de ser neutral o -lo que considera más importante- de incrementar la recaudación. Por ejemplo, los expertos de este organismo proponen subir tanto los impuestos especiales como los medioambientales y suprimir gradualmente los tipos reducidos del IVA. Precisamente, sobre esto último, el FMI ha dicho que a quienes más afectaría sería a las rentas altas y a los turistas extranjeros puesto que son los que más consumen. El organismo asegura que se podría compensar a partir del aumento de las transferencias sociales o los beneficios fiscales que reciben financiados por las rentas más pudientes. La otra crítica es sobre la perspectiva de creación de empleo del Gobierno. El Ejecutivo pretende generar puestos de trabajo a partir de una rebaja del IRPF y del Impuesto de Sociedades en vez de, como la institución afirma, un recorte específico de las cotizaciones de las empresas a la Seguridad Social. La tercera valoración negativa que elabora el FMI es sobre el ensanchamiento de las bases imponibles. Asegura que, ante todo, debe garantizarse la ampliación de las bases. Piensa que este ajuste elimina o limita algunas deducciones pero a su vez crea otras nuevas. Esto ocurre, por ejemplo, con la tributación de las pymes al crear nuevas reservas de capitalización y de nivelación.