Infancia

Unicef publica su informe sobre la violencia infantil

Por Gema Plaza2 min

Sociedad21-10-2014

Solo en 2012 murieron a causa de un homicidio 95.000 menores en todo el mundo, una cifra que nos destapa la realidad acerca del colectivo más vulnerable de la población, los niños. Unicef ha denunciado públicamente con este informe, que si los Gobierno de todo el mundo no aumentan sus medidas para el próximo año 2015, más de 300 podrían morir cada día por la violencia en cualquiera de sus variantes.

Muchas son las formas de maltrato a las que se enfrentan los menores: Asesinatos, violaciones, abusos, mutilaciones, trabajos forzosos, maltrato, reclutamiento. Atrocidades silenciadas por unos gobiernos a los que no conviene que toda esta deshumanización salga a la luz y que prefieren que la población siga con su vida sin retirar la venda de sus ojos, pues la realidad es verdaderamente espantosa. Puede que se trate de la mayor epidemia sin criterio médico que vivimos en la actualidad, pues indiferentemente de la clase social a la que pertenezcan, los menores están expuestos a todo tipo de violencia. Desde Unicef sostienen que son millones los niños que van con miedo al colegio y que viven con temor en sus hogares. Una situación insostenible para todos esos pequeños que solo deberían preocuparse por jugar y disfrutar de su infancia. No se trata de un problema que afecte solo a las comunidades menos desarrolladas. En Australia una de cada diez familias está a favor del castigo físico y psicológico para los niños. En 58 países del mundo, más de la mitad de los niños son educados de forma violenta en sus casas y en las escuelas. En EEUU, uno de cada diez chicos ha vivido algún tipo de incidente sexual, robo o asalto violento. Una de las agresiones más fuertes y crueles que existen, se da en Somalia y se practica con más del 98% de las mujeres, se trata de la ablación o mutilación genital, un castigo horrible que además pone en peligro la vida de las menores por posibles infecciones o pérdida de sangre. A día de hoy todavía 29 países en el mundo realizan esta práctica atroz. Las guerras constituyen un modo de violencia para todos aquellos menores obligados a alistarse y que sufren la violencia de los conflictos directamente y también para aquellos que residen en zonas en conflicto permanente y viven la violencia en forma de bombardeos o combates en la calle. Solo en Siria han muerto durante la guerra 10.000 menores y en Afganistán más del 70% de muertos por explosivos fueron menores. Son las consecuencias de la barbarie que recaen sobre los más débiles e indefensos.