Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

El sida, una enfermedad de pobres

Por Elena R. BenitoTiempo de lectura1 min
Sociedad09-07-2002

De los cuarenta millones de enfermos de sida que hay actualmente en el mundo, sólo un dos por ciento recibe la medicación necesaria. Ante lo contundente de estas cifras, las organizaciones no gubernamentales que han acudido a la Cumbre sobre el sida celebrada la semana pasada en Barcelona han exigido la universalización del tratamiento.

En concreto, el 90 por ciento de los enfermos del primer mundo recibe medicación, mientras sólo lo hace el cinco por ciento de los infectados en el tercer mundo. Esto hace que estas asociaciones denuncien que el sida se está convirtiendo en una enfermedad de pobres. La mayoría de los enfermos no tienen recursos y sólo los ricos pueden medicarse. Los laboratorios farmaceúticos que desarrollan los tratamientos han hecho una gran inversión que quieren rentabilizar, y por ello los medicamentos tienen un precio elevado, no asequible para el grueso de los enfermos. En los últimos años, sin embargo, la competencia entre los laboratorios ha hecho que los precios bajen: la terapia de suda cuesta hoy 209 dólares (unos 211 euros aproximadamente) por paciente y año, mientras que hace apenas un año alcanzaba los 10.000 dólares (10.100 euros). A pesar de esta drástica reducción, las organizaciones no gubernamentales denuncian a lo que denominan cártel de los laboratorios por bloquear con sus patentes el desarrollo de genéricos en los países en vías de desarrollo y subdesarrollados y por comprar con su financiación esta conferencia de Barcelona para adecuarla a sus intereses. Asociaciones como Intermón Oxfam, y Médicos Sin Fronteras, entre otras, denunciaron también que los gobiernos sólo han aportado el 20 por ciento de los 10.000 millones de dólares necesarios para financiar el fondo contra el sida de Naciones Unidas.