Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

LITERATURA

Los escritores americanos declaran la guerra a Amazon

Por Pedro Plasencia MartínezTiempo de lectura2 min
Cultura12-08-2014

Los nuevos formatos de lectura han dificultado el reparto de riquezas entre libreros, editores, distribuidores y autores en Estados Unidos. El último caso importante transmitido por los medios vincula nada más y nada menos que a Amazon, quien ha recurrido a tácticas comerciales deshonestas.

La compañía de servicio electrónico más famosa de internet se ha visto involucrada en una molesta disputa con el grupo editorial Hachette. El precio de los libros ha sido el detonante que ha llevado a la empresa online a perpretar un boicot basado en la anulación de pedidos, retrasos de entregas, eliminación de descuentos y en un llamamiento en favor del libro electrónico dirigido a todos los usuarios Kinle. El objetivo, ofrecer descargas más baratas a sus clientes para aumentar las ventas. Las medidas adoptadas por la empresa de Seattle han alarmado al sector literario, quienes no han tardado en salir en defensa del director de Hachette, Michael Pietsch, con una misiva firmada por las manos que han escrito los bestsellers más famosos del momento. Autores como Stephen King, Donna Tart, Paul Auster, Michael Gabon, John Grisham o Nora Roberts han manifestado su malestar en una carta dirigida al prestigioso New York Times denunciando la guerra sucia iniciada por Jeff Bezos, fundador de Amazon. El mensaje del comunicado emitido por el gremio de escritores es claro y directo "Pedimos a Amazon que resuelva esta disputa con Hachette sin hacer más daño a los autores y sin bloquear o demorar la venta de los libros a sus consumidores. Ningún vendedor de libros puede bloquear su venta o prevenir o desalentar al público de que pidan los libros que desean. No es justo que Amazon excluya a un grupo de autores para una venganza selectiva". La protesta ha recogido hasta el momento más de 900 firmas gracias a la iniciativa de Douglas Preston, promotor de la idea. Por otro lado, el gran gigante de la distribución en la red prefiere centrar la disputa en los porcentajes obtenidos a través del comercio en papel "Normalmente en la venta de un libro en papel los autores reciben el 10% y el resto se distribuye entre la editorial, la librería y la distribuidora. El sistema que nosotros proponemos se traduce en un reparto del 35% para el autor, 35% para la editorial y el restante 30% para el distribuidor. Creemos que Hachette paga una porción muy mínima a sus autores". El choque entre industria tradicional y modelo digital vuelve a traer a escena antiguos desacuerdos que ponen en peligro el futuro del libro. Y es que no es la primera vez que Amazon utiliza sus cuestionables métodos para presionar en las negociaciones, la compañía Disney y la Warner han sufrido también las tácticas de Amazon en sus artículos como moneda de cambio.