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ÁFRICA

Rajoy defiende los derechos humanos ante la Unión Africana

Por Sergio CastillaTiempo de lectura4 min
España26-06-2014

Mariano Rajoy habló de democracia y derechos humanos en un lugar donde ambas cosas brillan por su ausencia. El presidente del Gobierno ha defendido este jueves en Malabo (Guinea Ecuatorial) la candidatura de España a ingresar como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU en el bienio 2015-2016, en una campaña donde tiene como rivales a Turquía y Nueva Zelanda para solo dos puestos que quedarán libres para los países occidentales. La presencia de Rajoy hoy en Guinea supone la primera visita de un presidente español a la antigua ex colonia en 23 años.

En su discurso ante la 23ª Cumbre de la Unión Africana (UA), el presidente español ha prometido al continente que si España sale elegida su silla será también la de los países africanos. Y aunque ha reconocido que no venía a ofrecer ninguna ayuda económica -"no vengo a ofrecer nada porque no tengo nada que los africanos no pueden darse a sí mismos", ha dicho- sí ha indicado que España quiere participar en el "renacimiento" de África a través del comercio y las inversiones. "Queremos invertir en África como en su día invertimos en América Latina", ha señalado el presidente, que ha indicado que el comercio entre España y África ha crecido un 250 por ciento en los últimos diez años y hoy supera las cifras de intercambios entre España y América Latina. Ha recordado que aunque las inversiones españolas en África son aún pequeñas, sin embargo, no han parado de crecer. Después de remarcar que España tiene una relación con el continente africano "de igual a igual", ha justificado el interés de invertir en el desarrollo de África porque "cuanto más próspera sea África, más próspera será España". Ante los máximos representantes de los 54 países que conforman este foro, así como el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el presidente de palestina, Mahmoud Abbas, Rajoy ha considerado claves para el futuro de África la democracia, la paz y la apertura económica. Ha expresado que el futuro de cada país "debe ser decidido por los que están llamados a construirla con su trabajo" y que instituciones "sólidas, transparentes y abiertas a los ciudadanos producen sociedades inclusivas en las que las desigualdades menguan y el increíble potencial del ser humano puede expandirse sin límites". El jefe del Ejecutivo ha dicho que la democracia es un "proyecto compartido al que pueden contribuir todos los ciudadanos independientemente de su raza, sexo, ideología o religión, y con pleno respeto de los Derechos Humanos". No obstante, cree que hay muchos "caminos" hacia la prosperidad y la inclusión, de modo que "cada país debe seguir su propio camino y nadie debe dar lecciones a nadie". Rajoy también ha remarcado que la "combinación de paz, democracia y apertura económica" es lo que ha permitido a África seguir "creciendo con fuerza" mientras la crisis "golpeaba con fuerza al resto del mundo". Además, ha hecho alusión a la juventud africana, afirmando que, si bien el continente es rico en recursos naturales, "su principal recurso son las personas", ya que es el continente con la población más joven en un mundo que envejece. Por todo ello, el presidente español cree que "el futuro será africano", y "el desafío es proporcionar a los jóvenes africanos una oportunidad de sorprender al mundo con su creatividad, su energía y su trabajo". Rajoy también ha rememorado palabras del fallecido presidente sudafricano Nelson Mandela para defender la democracia, la justicia, la paz, la ausencia de racismo y sexismo, la "prosperidad para todos", un "entorno saludable" y la "igualdad y solidaridad entre los pueblos". Antes de su intervención, el jefe del Ejecutivo mantuvo un encuentro bilateral con el presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, que ostenta el cargo desde hace 35 años, con la oposición exiliada o reducida a un papel testimonial, y las libertades de expresión o reunión seriamente limitadas. Ambos presidentes se han reunido durante 20 minutos y han iniciado su conversación lamentando la eliminación de la selección española en el Mundial de Brasil. Fuentes de Moncloa indicaron que en esta entrevista se le planteó la conveniencia de que hiciera algún "gesto" en materia de derechos humanos, que se formalice la anunciada moratoria en la pena de muerte y se mejore la seguridad jurídica en las inversiones. En este sentido, próximamente podría desplazarse a Guinea una importante delegación comercial española. También se apoyó la iniciativa para que el español se convierta en lengua oficial de la Unión Africana. El jefe del Gobierno español también se ha entrevistado con el presidente de turno de la UA, el mauritano Mohamed Ould Abdelaziz, de quien partió la invitación para que interviniera ante los líderes africanos, y con la presidenta de la Comisión de la UA, Nkosazana Dlamini Zuma, exesposa del presidente surafricano, a la que ha invitado a visitar España, y ha charlado brevemente con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y con los presidentes de Túnez, Nigeria y Tanzania. Ante todos ellos ha elogiado el crecimiento económico del continente y les ha animado a avanzar en el proceso de integración africana -que prevé la creación de un mercado común a medio plazo- siguiendo el ejemplo de la Unión Europea.