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Caso Nóos

La infanta Cristina, imputada por blanqueo y delito fiscal

Por Jesús Espinosa Tiempo de lectura4 min
España25-06-2014

El juez Castro confirma la imputación de Cristina de Borbón, la hermana del rey Felipe VI, en el caso Nóos. El juez la sienta en el banquillo por, supuestamente, delito fiscal y blanqueo de capitales, unas actividades ilícitas que podrían acarrear penas de hasta 11 años de cárcel. Además, su marido, Iñaki Urdangarin, también es imputado pero por un total de nueve delitos: malversación, prevaricación, falsedad documental, tráfico de influencias, falsificación, estafa, fraude a la Administración y dos delitos fiscales.

La infanta se benefició, según la investigación judicial, de los negocios ilegales de su marido, Iñaki Urdangarin, en las administraciones públicas. El beneficio de dichos negocios, iba a parar a la empresa Aizoon, de la que la infanta es copropietaria con su marido. Así lo ratifica la investigación del juez, que ha hecho público este miércoles el auto de transformación de diligencias previas, en procedimiento abreviado, que dará paso a la apertura del juicio oral. En total, la investigación de este caso acumula casi 32.000 folios de documentación. Las razones por las que el juez decide mantener imputada a la infanta son, fundamentalmente, cuatro. La primera: Aizoon. El juez afirma que la infanta e Iñaki constituyeron esa institución para que sirviera de cauce para que los duques de Palma pudieran quedarse con el dinero desviado de la Generalitat Valenciana y el Gobierno balear. También sirvió para que Iñaki cobrara a través de ella sus servicios en los consejos de administración de varias multinacionales. En segundo lugar: pagos en negro a sus empleados. Aunque en su declaración ante el juez la infanta dijo que era “ajena a la actividad y gestiones de Aizoon”, el juez desvela que los duques de Palma se alternaban la presidencia de la institución al ser cónyuges; que los dos contrataron a personal, aun sabiendo que esos supuestos empleados nunca prestarían servicios a la sociedad. En el tercer lugar: cooperación en los fraudes fiscales. Según la Agencia Tributaria, los duques de Palma cometieron dos delitos fiscales en sus declaraciones del impuesto de la renta en los ejercicios de los años 2007 y 2008. Castro piensa que a diferencia con lo que declaró la infanta, ella lo sabía y toleró que su marido defraudara al fisco. Y en cuarto lugar: pagos con dinero de origen ilícito. La decisión del juez es que la infanta estuvo blanqueando dinero ilícito al usar los fondos de Aizoon (conseguidos en negro) para sus fines personales. Según Castro, la infanta solo ha intentado desvirtuar los hechos de los que estaba acusada mediante “la negación de la evidencia, la interminable apelación a la ignorancia y la falta de memoria, además de la gratuita derivación a terceros” de la responsabilidad. El juez ha afirmado que no tiene por qué valorar si esa actitud evasiva de Cristina de Borbón se debe o no a la “confianza, veneración, o amor que profesaba a su marido”. El juez mantiene la imputación de 16 de las 32 personas implicadas en la causa. La mayoría, pertenecientes a la trama empresarial dirigida por Urdangarin y su socio Diego Torres, además de otros ex altos cargos de distintas administraciones, que fueron los encargados de adjudicar a dedo contratos al Instituto Nóos. Hace aproximadamente cuatro meses, la infanta Cristina compareció ante el juez Castro al ser citada por este a declarar, también en calidad de imputada. En ese momento, la instrucción del caso aún no estaba cerrada, y la hermana del Rey se enfrentaba a un supuesto delito por fraude fiscal y blanqueo entre los años 2003 y 2006, además de delitos tributarios. En esa ocasión la declaración de la infanta se pudo resumir en: “Yo no sé nada” o “confío en mi marido”; palabras que sin duda no convencieron al juez, que la vuelve a sentar en el banquillo. La decisión del juez de mantener la imputación a los duques de Palma, pero sobre todo a la infanta, será recurrida por la Fiscalía, quien en la persona del fiscal anticorrupción, Pedro Horrach, ha asegurado que “no existe ningún elemento en contra de la infanta”, y también por la Abogacía del Estado ante la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca, quien tendrá la última palabra. Esta Audiencia ya decidió hace más de un año anular la imputación de la infanta, y pidió al juez más profundidad en el asunto. En el cierre de la instrucción, podría repetirse este hecho. Reacciones En cuanto a las reacciones que han suscitado noticia, la Casa Real ha expresado su “pleno respeto a la independencia del poder judicial”. Lo mismo que ha manifestado el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González: “Es una resolución judicial que hay que respetar”. También Alberto Ruiz-Gallardón, ministro de Justicia, ha recalcado el “respeto absoluto a la decisión del juez del caso Nóos”, aunque ha recordado que esa decisión aún es recurrible. También el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha asegurado que la decisión del juez Castro “pone de manifiesto que la Justicia actúa con independencia de la persona encausada” y en base “al criterio que se forma el juez”. Otro ministro, el de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, ve en la imputación de la infanta una muestra de que “el Estado de Derecho funciona” y que “la ley es igual para todos”, aunque sea la hermana del rey de España. Fuera del PP se aplaude la decisión de Castro con especial empatía. Es el caso de Cayo Lara, secretario general de Izquierda Unida, quien ha expresado que Castro “hace hecho justicia con mayúsculas”.