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Economía Española

El Gobierno mantiene el "carácter conservador" de su programa económico

Por Andrea Muñoz MartínTiempo de lectura2 min
Economía01-05-2014

El Gobierno se reafirma en su postura de gestión económica. El Programa de Estabilidad 2014-2017 aprobado por el Ejecutivo y que será presentado a Bruselas prevé una mejora sustancial del marco macroeconómico de España en los próximos años. Por ello, se continuará con la utilización de medidas de “carácter conservador” que, según el Gobierno, ayudarán a “proyectar un crecimiento económico moderado” en el futuro.

Para el Gobierno, los signos de recuperación económica son evidentes. El segundo semestre de 2013 sirvió para encauzar una “pauta de mejora progresiva” que se ha ido afianzando a lo largo de este año. La paulatina remisión de la tensión en los mercados financieros, así como la mejora “del comportamiento del mercado laboral” y, sobre todo, el incremento de la confianza son, a juicio del Ejecutivo, indicios claros de estabilidad. Algunas de las correcciones macroeconómicas que ha experimentado España en el último año han sido, por ejemplo, el aumento del consumo ya que, según el Ejecutivo, “el gasto privado ha mostrado una paulatina mejora”. También han destacado el “menor debilitamiento del mercado de trabajo”, así como el mantenimiento “de la tasa de ahorro de los hogares”. Sin embargo, la realidad es que estos datos no implican más que un cambio de tendencia. De hecho, la Encuesta de Población Activa presentada el pasado martes constató la destrucción de más de 184.000 puestos de trabajo durante el primer trimestre del año; una cifra que choca con la modesta bajada del paro en 2.300 personas. A pesar del tono positivo de la mayoría de los augurios del Gobierno, lo cierto es que el desempleo sigue siendo la asignatura pendiente. Según el cuadro macroeconómico, el índice de paro no bajará del 20% hasta el año 2017; un dato que confirma las predicciones del FMI en 2011 que, a pesar de calificar a España como “un modelo de crecimiento a seguir”, advirtió que el fuerte desempleo dejaría en el país “una generación perdida”. Sin embargo, no todos los pronósticos son tan lóbregos. Según el ministro de Hacienda y Obras Públicas, Cristóbal Montoro, no se producirán en los próximos años " más subida de impuestos que aquellas que se deriven de la normativa comunitaria”. De esta forma, Montoro ha señalado que no resulta necesario “elevar la presión fiscal” para enfrentarse al uno de los principales problemas de la economía en España: la reducción del déficit público. Un déficit que, según las exigencias de Bruselas, debería verse reducido un 5,8% a finales de este año. Sin embargo, el Gobierno solicitará en Europa una reducción del porcentaje en tres décimas. El ministro, que no ha aportado ningún dato sobre la nueva reforma fiscal que presentará este año, ha asegurado que las previsiones contemplan “la financiación de la economía” en consonancia “con la creación de empleo”; aunque sí ha adelantado que tendrá lugar una rebaja en los tipos de IRPF y Sociedades. Otra de las previsiones es la recuperación de la demanda interna, que se mejora tras tres años en negativo, así como otros aspectos relacionados con el fortalecimiento de la competitividad española, como la bajada de la “tensión inflacionista”.