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Población

Desciende el número de inmigrantes en España

Por Carlos Martínez de LeyvaTiempo de lectura3 min
España11-12-2013

El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó este martes las Cifras de Población y la Estadística de Migraciones. El número de habitantes disminuyó en la primera mitad de 2013 en 118.238 personas. La población de España el 1 de julio de este año se situaba en 46.609.652 habitantes, un 0,31 por ciento menos que un año antes. Lo que significa que España pierde población por tercer semestre consecutivo, ya que los inmigrantes han dejado de venir de forma generalizada y cada vez son más los que se van, tanto extranjeros como españoles.

Tenemos un "saldo migratorio" negativo con 124.915 habitantes menos este semestre. La inmigración bajó en un 11 por ciento y la emigración creció un 10,7 por ciento. se han ido 259.227 personas y han venido 134.312. Entre los 259.227 que han emigrado, 39.690 son españoles (26.281 nacidos en España y 13.409 nacidos en el extranjero pero nacionalizados españoles) y 219.537, la gran mayoría, son foráneos. El número de residentes extranjeros baja un 4 por ciento, según el INE "sobre todo debido a la emigración y a la adquisición de nacionalidad española", concedida a 123.967 ciudadanos entre enero y junio. Actualmente hay 4.870.487 extranjeros residentes en España. Entre las nacionalidades que más residentes han perdido son la colombiana, la peruana, la boliviana, la ecuatoriana, la marroquí y la rumana. Entre los emigrantes, la mayoría son hombres de entre 30 y 34 años, seguidos de los de 35 a 39 años y de los de 25 a 29 años. Es una inmigración predominantemente laboral que no ha visto cumplidas sus expectativas de encontrar trabajo. La emigración de los españoles, durante la primera mitad de 2013 aumentó el flujo en un 26,3 por ciento respecto al semestre anterior. Dos de cada tres españoles que emigran han nacido en España, aunque el INE precisa que esta proporción varía mucho según los destinos. Y así se pone de manifiesto cuando se observa que el principal país receptor es Ecuador, seguido de Reino Unido y Francia. En el caso de Ecuador se trata de población no nacida en España o de niños menores de 15 años, lo que indica una migración de retorno de ecuatorianos de origen que adquirieron la nacionalidad española con sus hijos nacidos en España. Algo parecido ocurre con Venezuela y Argentina: sus emigrantes son quienes vinieron a España junto con sus hijos, que nacieron aquí. Por comunidades autónomas, en el primer semestre la población solo creció en Baleares (0,5 por ciento), Canarias (0,2 por ciento) y Murcia (0,1 por ciento) además de en la ciudad autónoma de Ceuta (0,2 por ciento). Las demás siguen perdiendo vecinos. El descenso poblacional no obedece sólo a la diferencia entre la inmigración y la emigración (el saldo migratorio), sino también al "saldo vegetativo", que es la cifra que se obtiene tras restar el número de los nacidos al de los fallecidos. En este primer semestre el número de nacimientos fue de 210.199 y el de defunciones se sitúa en los 203.522. El saldo vegetativo, al contrario que el saldo migratorio, es todavía positivo: 6.678 nacimientos más que defunciones. Respecto a los extranjeros llegados a España, los más numerosos fueron los marroquíes que incrementan su población (11.253), los rumanos (10.471) y los británicos (6.875). Aunque, por el contrario, los países cuyas nacionalidades de quienes abandonaron España en el primer semestre fueron Rumania (37.018 salidas), y Marruecos (27.362 salidas ), países que tienen además las nacionalidades mayoritarias entre la población extranjera residente en España. Por nacionalidades, el mayor descenso en términos absolutos (salidas menos llegadas) se da entre la población ecuatoriana y la colombiana con un descenso de más de 28.000 ciudadanos de cada una de estas nacionalidades. A continuación, destaca el descenso de los ciudadanos rumanos y marroquíes (23.000 menos en ambos casos) mientras que, por el contrario, sólo creció la población italiana, en 627 personas.