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Latinoamérica

Cristina Fernández sale bien parada

Por Carlos Martínez de LeyvaTiempo de lectura3 min
Internacional09-10-2013

La presidenta argentina, Cristina Fernández "ha salido bien" de la operación del martes pasado para drenar un hematoma craneal, y está de «muy buen ánimo», según fuentes oficiales. El portavoz presidencial, Alfredo Scoccimarro, ha anunciado que la operación ha sido «satisfactoria» y que Fernández se encuentra ya en su habitación. El parte médico ha señalado que «se le realizó la evacuación de un hematoma subdural derecho a la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en una cirugía sin complicaciones».

El informe asegura, que «la paciente evoluciona favorablemente, permaneciendo internada en la Unidad de Cuidados Intensivos». Cristina Fernández padece una acumulación de sangre y líquidos en la duramadre, la más externa de las las meninges, las tres capas que envuelven al cerebro y se sitúan entre este órgano y el cráneo. Su gravedad depende del tamaño, dónde esté localizada y el estado general del paciente . La operación comenzó en el hospital universitario de la Fundación Favaloroa las 8.30 hora local y se prolongó durante alrededor de hora y media. Fue llevada a cabo un equipo médico encabezado por el cirujano Facundo Manes, de 40 años, egresado de la universidad de Buenos Aires y especializado en Francia "Se le realizó la evacuación del hematoma subdural derecho a la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en una cirugía efectuada ", precisó el comunicado, que añade que la dirigente permanecerá internada en la Unidad de Cuidados Intensivos. Previamente "fueron descartados los riesgos cardiovasculares a través de distintos exámenes complementarios", agrega un documento que lleva la firma del cirujano Facundo Manes, director de Neurociencias de la clínica privada Favaloro, y de Gerardo Bozovich, director médico del centro sanitario. La salud de la presidenta ya se había días antes . El sábado pasado, los neurocirujanos descubrieron que la jefa de Estado, de 60 años, padecía un hematoma. Pero igualmente la mandaron de vuelta a la residencia presidencial, en la creencia de que el cuerpo lo absorbería, con baja médica y reposo por un mes . La situación se complicó más el domingo con "sensación de hormigueo en el brazo izquierdo" y "leve pérdida de fuerza muscular" en ese órgano superior, según un comunicado de los neurocirujanos Facundos Manes y Gerardo Bozovich. Antes del ingreso de la Jefa del estado en la Fundación Favaloro se materializó la delegación de funciones en la figura del vicepresidente argentino. Amado Boudou , de 52 años, asumió la agenda de la presidenta y es, oficialmente, el Presidente en funciones. Boudou, salpicado por una decena de casos de corrupción El artículo 88 de la Constitución argentina advierte que «el Poder Ejecutivo será ejercido por el vicepresidente de la Nación» en caso de «enfermedad, ausencia de la Capital, muerte, renuncia o destitución del Presidente». El sábado pasado, los neurocirujanos del centro sanitario descubrieron que la jefa de Estado, de 60 años, padece un hematoma, entre la corteza del cerebro y la meninge, por un golpe en la cabeza de agosto pasado. Luego la mandaron de vuelta a la residencia presidencial, en la creencia de que el cuerpo lo absorbería, con baja médica y reposo por un mes. Pero su salud se complicó más el domingo con "sensación de hormigueo en el brazo izquierdo" y "leve pérdida de fuerza muscular" en ese órgano superior, según un comunicado de los neurocirujanos de la presidenta. Por ello prescribieron, cuanto antes, abrir el cráneo a la paciente y drenar la sangre del hematoma. Y la mandataria dio orden al notario de Gobierno, Natalio Echegaray, de concretar el acta oficial de traspaso total de poderes al vicepresidente Amado Boudou , de 52 años, ahora presidente interino de Argentina.