ANIVERSARIO

El epitafio de Groucho continúa 36 años después de su muerte

Por Pedro Plasencia Martínez2 min

Espectáculos20-08-2013

Han pasado 36 años desde que una odiosa neumonía se llevara el bigote pintado más famoso del cine. Este mes se cumple el aniversario de la muerte de Julius Henry Marx, más conocido como Groucho Marx, titán del humor, actor, cantante, escritor, amante sarnoso, y sobre todo, hermano Marx.

Siendo el cuarto de los hermanos de una familia numerosa y a pesar de las dificultades económicas, siempre tuvo clara su dedicación por el teatro cómico y el vodevil, ámbito donde curiosamente tropezó con Charles Chaplin cuando éste era aún un desconocido. Sin embargo, fue una de sus representaciones en Broadway lo que conseguiría abrirle las puertas del cine sonoro en 1929. En la filmografía del grupo, que llega a la friolera de 14 películas, Groucho protagonizó títulos tan emblemáticos como Sopa de ganso, Una noche en la ópera o Un día en las carreras , producciones de los estudios cinematográficos más importantes del momento, la Paramount y la Metro. Cada una de estas joyas ha dejado para la historia del cine clásico sketches inmortales como el del pequeño camarote, el del tren y la madera o el del juego de los espejos, así como numerosas actuaciones musicales donde todos los componentes del equipo mostraban sus talentos. Entre sus compañeros de rodaje era él quien aportaba el contenido picaresco a las cintas de los hermanos Marx, combinando a menudo enrevesados juegos de palabras y comportamientos bipolares. Ataviado con unas gafas circulares, un habano, un falso bigote y unas cejas pobladas, el personaje pasaría a la historia por sus atrevidos chistes y su forma de moverse en el escenario. Después del éxito, el más gruñón de los hermanos continuaría su carrera en solitario en distintos medios como la radio, el teatro, la literatura, la música, y especialmente en la televisión con el programa You Bet Your Life . En 1973 reaparecería en la pequeña pantalla con motivo de una entrevista conducida por el también humorista Bill Cosby. En 1977, con 86 años encima, dejaba a tres ex esposas, tres hijos y una legión de fans e imitadores por todo lo largo y ancho del mundo, sus fieles marxistas. Las frases más ingeniosas del artista, incluyendo su platónico epitafio, se han dejado leer estos días en las redes sociales como homenaje digital póstumo. A pesar de que sigue sin levantarse de su tumba, lo cierto es que Groucho Marx seguirá cosechando las carcajadas de cualquier persona que esté dispuesta a pasar un rato memorable con las payasadas más infantiles y el humor más absurdo.