CASO PALAU
Mas devolverá el dinero si prueban las irregularidades
Por Ana Pascual Ases
3 min
España31-07-2013
En su comparecencia en el Parlament, el presidente catalán, Artur Mas, ha dado explicaciones sobre la presunta financiación ilegal de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), vinculada al caso del Palau de la Música. Mas, acompañado de la vicepresidenta, Joana Ortega, y del conceller de Presidencia, Francesc Homs, ha negado que hubiese un trato de favor a la constructora Ferrovial, empresa que presuntamente pagó comisiones ilegales al partido por valor de 5,1 millones de euros a cambio de concesiones de obras públicas, confiando así en que el juez lo valorará cuando se celebre el juico oral del caso Palau.
El presidente de la Generalitat, durante su comparecencia en el Parlament, ha subrayado que todas las adjudicaciones de obras que la Generalitat de Jordi Pujol hizo a la constructora Ferrovial fueron “correctas” y “transparentes”. Sin embargo, el juez instructor del caso Palau, Josep María Pijuan, ha considerado que el partido de Mas pudo cobrar comisiones por 5,1 millones de euros por las concesiones a esa constructora con el Palau de la Música como intermediario. El presidente ha lanzado al resto de grupos políticos la posibilidad de que comprueben dichas adjudicaciones, entre ellas la de la Línea 9 del Metro o la de la Ciutat de Justícia, que según él “ninguna de estas obras está discutida desde el punto de vista de la adjudicación. Incluso en algún caso, Ferrovial presentó el mejor precio y no se le concedió la obra”, ha explicado. Mas ha defendido que “si se adjudicaron correctamente es que no hubo trato de favor”. Mas ha insistido durante su discurso que nadie “se ha escondido ni se esconderá” a la hora de dar explicaciones por el caso Palau, así como tampoco se esconderá cuando sea necesario tomar “decisiones incluso dolorosas” durante la tramitación judicial del expolio del Palau de la Música, recordando de esta manera, que siendo secretario general de CDC, aceptó la dimisión del imputado Daniel Osàcar, responsable de finanzas del partido, y ordenó que se devolvieran 630.000 euros de convenios entre la fundación de CDC y el Palau. El presidente catalán no ha negado “la gravedad de los hechos”, pero sí ha pedido al Parlament que den prioridad a dos principios, el de igualdad de trato de acusación y defensa hasta que haya sentencia, y el de la presunción de inocencia. Mas ha subrayado que una vez se dicte la sentencia sobre el caso, si se derivan responsabilidades vinculadas a CDC, el partido se verá obligado a tomar decisiones oportunas y devolverá “hasta el último céntimo de euro”. Aunque durante su comparecencia, Mas ha indicado con seguridad que está “convencido de que no pasará”, recordando de esta manera que su formación “ha asumido decisiones siempre que ha sido necesario”, y lo seguirá haciendo si es conveniente. El presidente ha dedicado su intervención inicial para apoyar las medidas que su ejecutivo está llevando a cabo con el fin de mejorar el control en la adjudicación de obra pública, aunque ha indicado que “no se encontró nada” en la “macroauditoría” que hizo el gobierno tripartito del presidente Pasqual Maragall a raíz de la polémica por las presuntas comisiones ilegales del 3%. Mas ha recurrido también a otros casos de corrupción que afectan a otros partidos para defenderse, realizando varias menciones implícitas al caso Bárcenas, que afecta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al caso Filesa, por el cual se demostró la financiación ilegal del PSOE para la campaña electoral de 1989. El líder del Govern ha instado a la oposición a llevar a cabo una moción de censura contra él si lo consideran oportuno, ya que varios partido han defendido durante sus intervenciones que Mas debe abandonar el cargo, “tienen ese instrumento” para conseguir que deje su cargo, ha considerado. Pero los partidos de las oposición, han obviado el reto lanzado por Mas, excepto el presidente del partido Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía (C’s), Albert Ribera, quien ha dicho que su partido no descarta presentar la moción de censura porque Cataluña tiene un presidente que “no admite responsabilidades, no gobierna y no presenta presupuestos”. El juez instructor del caso Palau, abierto hace casi cuatro años, cree que Ferrovial abonaba por regla general una comisión del 4% del importe de la obra adjudicada, del que un 2,5% se asignaba a CDC, y el 1,5% restante al ex presidente del Palau, Fèlix Millet, y al ex responsable de las finanzas de la institución, Jordi Montull, por su intermediación.