CRISIS ECONÓMICA

Se publican las clasificaciones de competitividad mundial

Por Pepe Olmedo2 min

Economía30-05-2013

IMD, una escuela empresarial mundial con una elevada reputación, ha anunciado sus clasificaciones de competitividad mundial del 25 aniversario, en las que se encuentran estudiadas 60 economías para el año 2013. Los Estados Unidos y Suiza encabezan la clasificación en relación a la competitividad entre países para este año.

De esta manera, los Estados Unidos han vuelto ha conseguir el puesto número uno en 2013, como consecuencia del rebote del sector financiero, la abundancia de las innovaciones tecnológicas y el éxito cosechado por las compañías. Por su parte, China y Japón, que se encuentran en los puestos 21 y 24 respectivamente, también siguen aumentando su competitividad. En Japón concretamente, las Abenomics parecen haber tenido un impacto favorable que ayuda en el dinamismo de la economía. En Europa, las naciones más competitivas han sido Suiza, que se ha colocado en segunda posición, Suecia, cuarta, y Alemania, que se sitúa en el noveno puesto. El éxito de estos tres países se basa en la fabricación orientada a la exportación, sus economías diversificadas, empresas pequeñas y medianas (PYMEs) y a la disciplina fiscal que poseen. El resto del continente europeo se encuentra muy obligado como consecuencia de los programas de austeridad que están retrasando la recuperación y poniendo en duda la oportunidad de las medidas propuestas. Mientras, las economías de la zona BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) han registrado resultados desiguales. China y Rusia han experimentado un ascenso y se colocan en los puestos 21 y 42, mientras que India (40), Brasil (51) y Sudáfrica(53) han sufrido un descenso en la clasificación. En general, las economías emergentes continúan siendo muy dependientes de la recuperación económica mundial, la cual parece que se está retrasando de los límites esperados. Respecto a Latinoamérica, México ha experimentado una ligera reactivación en su competitividad y se sitúa en el puesto número 32, pero en estos momentos necesita que esta reactivación se confirme con el tiempo y a través de la implementación continuada de reformas estructurales. En su clasificación, IMD asegura que “al final, las normas de oro de la competitividad son sencillas: fabricación, diversificación, exportación, inversión en infraestructuras, formación, apoyo a las PYMEs, refuerzo de la disciplina fiscal y por encima de todo, mantenimiento de la cohesión social”.