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Consumo

El Gobierno ampliará una semana la caducidad de algunos alimentos

Por Irene HernándezTiempo de lectura1 min
Sociedad16-01-2013

Con el objetivo es intentar reducir la gran cantidad de comida que se desperdicia cada día, la Agencia de Seguridad Alimentaria ha iniciado la revisión de todas las normas de calidad de los productos para un nuevo etiquetado con la finalidad de modificar las fechas de caducidad y el envasado de los productos. Así lo ha asegurado el ministro de Agricultura, Medio Ambiente y Alimentación, Miguel Arias Cañete, quien ha explicado que se tendrá en cuenta que la fecha de caducidad y la de consumo preferente son dos cosas diferentes.

El Ejecutivo ha tachado de "intolerable" el despilfarro de comida, por eso se plantea ahora ampliar la fecha de caducidad de una gran parte de los productos alimenticios. "No puede ser que en la Unión Europea haya cerca de 89 millones de toneladas que se tiran al año en buen estado y en España, 7,7 millones de toneladas, el 42 por ciento en los hogares", ha señalado Arias Cañete. El ministro ha explicado que llevan "mucho tiempo trabajando en una estrategia para la reducción y valorización de los alimentos desechados”. “Estamos haciendo una estrategia para ver cómo evitar pérdidas en la producción, transformación y comercialización en los hogares", ha destacado. El equipo de Cañete ha revisado en los últimos meses toda la cadena alimentaria para ver en qué punto se desperdicia más comida y tiene casi listo el informe sobre el que se basará la nueva normativa. Las nuevas tecnologías de conservación “pueden hacer que la vida útil de los alimentos se amplíe”, según el ministerio. Las fechas de vida útil de los productos las decide el propio fabricante, en base siempre a las pautas generales de seguridad que fije la normativa. Sin embargo, el Gobierno piensa que algunos de estos criterios no atienden tanto a la seguridad o la calidad como a la estética, algo que el Ejecutivo pretende cambiar con la nueva regulación. Según el ministro, hay restaurantes, hogares y tiendas de alimentación que tiran o retiran alimentos porque estéticamente no tienen una buena apariencia, "pero que se pueden comer perfectamente".