Vivienda

Una casa por 160.000 euros y permiso de residencia

Por Irene Hernández2 min

Economía20-11-2012

El Gobierno concederá el permiso de residencia en España a los extranjeros que compren una vivienda por más de 160.000 euros. Es el último plan que va a llevar a cabo el Ejecutivo para reducir el stock de viviendas. Esta propuesta está dirigida sobre todo a chinos y rusos. Oposición, organizaciones de inmigrantes y sindicatos no ven con buenos ojos este plan.

"En unas semanas se va a poner en marcha una reforma del Decreto de extranjería para conceder permisos de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda a partir de un nivel de precio. El objetivo es reactivar la demanda exterior y contribuir a reducir el stock de oferta de viviendas". Así lo ha anunciado Jaime García-Legaz, secretario de Estado de Comercio. El límite del precio se fijará en 160.000 euros, ya que según García-Legaz es un importe “equilibrado”. "No se puede poner un límite de precio más bajo, porque generaría una demanda masiva de permisos de residencia. Un precio inferior podría servir de excusa para obtener la residencia", apuntó. El objetivo principal del Gobierno sería reducir el stock de viviendas que actualmente hay en España, ya que por parte de los españoles "no se ve mucha capacidad de compra por la falta de crédito". El mercado ruso y chino sería a quien se piensa dirigir este plan ya que en los últimos meses se ha observado "una demanda importante de vivienda en España" por parte de estos colectivos, afirma el secretario. Mariano Rajoy afirmó que “no hay una decisión tomada por parte del Gobierno". Sin embargo, García-Legaz aseguró que este plan "se pondría en marcha en unas semanas" mediante un cambio en la ley de Extranjería. Desde el principal partido de la oposición se muestran prudentes ante esta propuesta. Creen que la intención del Gobierno no es “ni siquiera verisímil”. Elena Valenciano, vicesecretaria general del PSOE afirma que existen otras medidas más “rigurosas”, si lo que de verdad se quiere es reducir el stock de viviendas disponibles. Por parte de los sindicatos, tanto UGT como CCOO se manifiestan sorprendidos. Cándido Méndez, secretario general de UGT ha calificado el plan como “descabelladlo, injusto e impresentable”. “El Gobierno va a cambiar unilateralmente el criterio y los requisitos para permitir la entrada de trabajadores en España y poner al servicio de los mercados el Reglamento de la Ley de Extranjería; solo aceptamos ciudadanos ricos”, afirman desde UGT. Ignacio Fernández Toxo, secretario general de CCOO, ha catalogado la propuesta como rara, “suena novedoso, pero raro”, afirma Toxo. Dice que no sabe si este plan "va asociado solo a permiso de residencia o también a permisos de trabajo". Si fuera esto último se pregunta "qué tratamiento van a tener los inmigrantes sin papeles". Si va a ser el nivel de renta "lo que determina si una persona es sujeto de derechos que a otros con otro nivel de renta no se le dan", apuntó Toxo. Gilberto Torres, presidente de la Federación Estatal de Asociaciones de Inmigrantes y Refugiados en España (Ferine), señala que “esta nueva perla del Gobierno es excluyente porque está dirigida a los ciudadanos chinos y rusos. Además, es ofensivo que el PP determine este tipo de planes, que sólo benefician a la banca y a los grandes capitales”. Colectivos de inmigrantes chinos y rusos también se muestran escépticos ante esta nueva medida anunciada por el Ejecutivo nacional.