SUDAMÉRICA

Argentina, a punto de quedarse sola con sus problemas

Por Raquel González2 min

Economía05-05-2002

Cada semana hay una nueva caída de algún apoyo que ya no puede aguantar más el lastre que supone la tendencia derrotista de la economía argentina. Con ministro de Economía recién estrenado y nuevo plan económico dispuesto a resucitar el aletargado desarrollo argentino, nada parece suficiente para devolver la seguridad a nadie de que algo provechoso saldrá de tanto sacrificio.

El último susto lo ha dado el banco español Santander Central Hispano (SCH) que ha anunciado que la filial de la entidad en Argentina, el Banco Río de la Plata, sólo tiene liquidez para tres meses, con lo cual, si no pasa nada que cambie radicalmente la marcha de las cosas, el SCH podría abandonar Argentina entre los meses de julio y agosto de este año. No es una opinión aislada, también la han apoyado el Banco Francés, filial del español Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), el HSBC y el Bank of Boston. Este tipo de decisiones no son la mejor terapia para la desesperación que barre Argentina, pero parece que sí es la mejor opción en un sistema capitalista donde sólo importa obtener beneficios. El mismo presidente del Gobierno español, José María Aznar, ha afirmado que nadie, ni siquiera el Gobierno, puede obligar a las empresas a permanecer en un país que no ofrece perspectivas de negocio. Mientras, sigue la pugna con el Fondo Monetario Internacional (FMI). A pesar de que Argentina a adoptado la decisión de acercar posturas al FMI, el país no está dispuesto, según el recién nombrado ministro de Economía, Roberto Lavagna, a “aceptar la totalidad de las cosas que el organismo internacional plantea”. Lavagna ha llegado a apelar a la conciencia del FMI para que recapaciten sobre la política económica que el organismo está imponiendo a países con crisis económicas. En muchos de estos países, que han seguido a rajatabla las recomendaciones del FMI, la crisis económica se ha mantenido e incluso se ha agudizado. Son casos que se han vivido en África, en Asia, en Rusia y en la propia Sudamérica. De hecho, al FMI se le ha criticado que Argentina, en parte, está como está por haber seguido al pie de la regla los mandatos del Fondo Monetario. A esta situación de inestabilidad se le sumará a lo largo de la presente semana la publicación de los datos de la inflación del mes de abril que, según las primeras estimaciones, superaría el 10 por ciento.