Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

NBA

Vuelve la NBA

Por Mario Viera Tiempo de lectura3 min
Deportes03-11-2012

Comienza la temporada 2012-13 de la mejor liga de baloncesto del mundo. Y como es usual, viene cargada de cambios. Las distintas alineaciones en equipos como los Lakers, Rockets o Celtics serán las protagonistas. Pero nadie podrá quitarles el papel estrella a los Heat, equipo en el que Lebron James busca revalidar su título de campeón y MVP. Por su parte, Antohny Davis busca convertirse en el rookie del año de un draft comparado con el del 2003. Comienza la carrera por convertirse en el rey de la NBA.

Los Miami Heat comenzaron la defensa de su titulo con la victoria sobre los Boston Celtics. En la noche en la que se inauguraba oficialmente la temporada, el equipo de Florida quiso mandar un mensaje al resto de equipos de la liga. Y lo hizo. Con un sublime Dwyane Wade que se fue hasta los 29 puntos, los Heat despacharon a los Celtics sin grandes problemas. Para añadirle dolor a la derrota, Spoelstra se aseguró de que Ray Allen, antiguo jugador de los Celtics, también pusiera su granito de arena en la ofensa. El escolta se fue hasta los 19 puntos. El partido de los Heat fue sublime. Lebron James también superó los 20 puntos, con 26, y Chris Bosh se fue hasta los 19. En su debut, Rashard Lewis también dejó buenas sensaciones, y anoto 10 puntos. En total fueron cinco jugadores los que rebasaron los dobles dígitos. Los Celtics no jugaron un mal partido. Cinco de sus jugadores también superaron los 10 puntos. Pierce con 26, Bass con 15, Lee con 11, Rondo con 20 y Barboza con 16. Pero el ritmo de los Heat en ataque, y la contribución del banquillo, arrolló la defensa del equipo verde, que no se puedo recuperar. El marcador final fue un 107-120. Las alarmas han saltado en Los Angeles. Los Lakers encadenan en total 10 derrotas consecutivas. Ocho fueron en pretemporada, y 2 en la temporada regular. El gran problema que tienen las alineaciones formadas en su totalidad por super estrellas, es que los jugadores pueden no llegar a entenderse. Como ya pasó en los Lakers en los años de Shaquille O’Neal, Kobe, Karl Malone y compañía. Hasta el momento, la defensa de los angelinos, ha sido casi tan errática como su ataque. En papel, los Lakers están jugando bastante bien. Pero tendrían que jugar mucho mejor si vemos los nombres que componen su alineación. Tardan en encontrarse los unos a los otros demasiado, perdiendo rebotes y balones. En el partido contra los Trailblazers, los de Mike Brown perdieron 24 balones frente a los 12 de sus oponentes. Y sus porcentajes de tiro tampoco son mucho mejor. Además, los problemas crecen para los Lakers. Steve Nash no jugará en el partido con los Clippers. La estadística en la historia de la NBA, dicta que un equipo que no gana ningún partido en pretemporada, y que se estrena con una derrota en la temporada regular, no alcanza los Playoffs. La gesta que tienen los Lakers por delante es dura. Deben encontrar una química, que hasta el momento es inexistente, y además contradecir a la historia de la liga. Anthony Davis se estrenó dejando muy buen sabor de boca. No solo por su buen partido, si no por que su equipo, aunque perdió contra los Spurs, hizo sudar a los tejanos. Esta claro que los Hornets tienen por delante un año de reconstrucción, pero el equipo pinta bien. Davis y Rivers se han acoplado muy bien al equipo, y hasta el momento han aceptado sus nuevos roles dejando muy buenas impresiones. En la noche inaugural, Davis se fue hasta los 21 puntos, 7 rebotes y 1 tapón. Fue el máximo anotador y el referente en defensa de su equipo. Molestó y estorbó en todos los tiros de todo ser viviente que se acercase a la canasta de los Hornets. Por parte de los Spurs, su partido fue excelente como siempre. Solamente se dejaron estar en los últimos minutos. Momento que aprovecharon los jóvenes de Lousiana para tomar la delantera. Por detrás en el marcador, fue la mando de Anthony Parker a 46 segundos del final la que le dio la victoria a los Spurs por 99-95.