TERRORISMO

Valencia, centro del terrorismo islamista

Por Aída Menéndez Cuesta2 min

España27-03-2012

La Guardia Civil ha detenido a un terrorista islámico en Valencia. Su clara implicación con la organización quedaba contrastada en la red. Una misión que se centraba en captar y adoctrinar futuros terroristas a través de la difusión de productos audiovisuales en Internet. Además, facilitaba transporte a los terroristas hasta Afganistán o a otras zonas en las que actúa el grupo terrorista Al Qaeda.

Valencia ha sido escenario del terrorismo islámico. M.H.A. ha sido detenido por la Guardia Civil, tras la investigación dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional. Un seguimiento que se ha estado gestando desde Febrero de 2011, y que, finalmente, ha dado sus frutos. El terrorista pertenece al movimiento del salafismo yihadista, el cual rechaza limitar la acción religiosa a la predicación, y hace de la yihad o guerra santa el centro de su actividad. La tendencia de esta corriente está enfocada a un combate armado en el que la instauración de un estado puramente islámico es su fin último. El detenido vivía en el Paseo de Juan XXIII de Valencia y era el encargado de gestionar el entorno virtual en el que se difundían contenidos audiovisuales que fomentaban los actos terroristas. Un foro de carácter yihadista cuya función era el adoctrinamiento de los futuros terroristas. Para ello, el acusado, trabajaba diariamente entre 8 y 16 horas, facilitando el transporte de los terroristas a Afganistán o a otras zonas en las que actúa Al Qaeda. El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, asegura que el detenido "Era conocido en el seno de la organización como 'El bibliotecario de Al Qaeda' y administraba uno de los foros yihadistas más importantes del mundo que se dedicaba a la difusión de las actividades terroristas y el adoctrinamiento y captación de terroristas. Para entendernos, la formación de personas como Mohamed Merah, el asesino de Toulouse, se produjo a través de actuaciones como estas". Una vez registrado el piso, los vecinos aseguraban que el terrorista parecía una persona normal y discreta, que vivía con su esposa y su hija de 15 años, por lo que la detención les ha pillado por sorpresa. Nadie podía sospechar que su vecino formase parte de una de las ramas más violentas y radicales del Islam, cuya imposición sanguinaria se está gestando desde el mundo de Internet.