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PIRATERÍA ON-LINE

El FBI cierra el “paraíso” de las descargas on-line

Fotografía Con este mensaje atraía nuevos clientes la página web clausurada [foto: Megaupload]

Con este mensaje atraía nuevos clientes la página web clausurada [foto: Megaupload]

Por Silvia Álvarez-BuyllaTiempo de lectura3 min
Comunicación22-01-2012

“Error”, “fallo”… Millones de usuarios se han encontrado en estos últimos días con mensajes parecidos en sus programas de descarga. Megaupload el mayor paraíso de descargas on-line ha desaparecido como por arte de magia. El departamento de Justicia de EEUU y el FBI han clausurado la página y los responsables están detenidos por un delito de piratería y evasión de impuestos. Tenían 60 cuentas repartidas por todo el mundo y uno de sus 1.700 servidores, el ubicado en Virginia, ha sido la clave para su detención.

Megaupload, Megavideo, Megapix, Megalive y Megabox desaparecen del mapa de la piratería y también quedan inaccesibles todos los links de Seriesyonkis.com o Cinetube, entre otros, que se alojaban en estos servidores. El Departamento de Estado de EEUU, junto al FBI y otras autoridades internacionales, han clausurado estas páginas de intercambio de archivos y han detenido a sus responsables, acusados de conspiración de crimen organizado, infracción de derechos de autor, blanqueo de dinero y violación de la propiedad intelectual. El Departamento de Justicia afirma en una nota pública que han generado más de 175 millones de dólares en actividades delictivas y han causado "más de 500 millones de dólares en daños a los propietarios de las obras protegidas". El fundador, Kit “Dotcom”, de 38 años, se podría enfrentar a 50 años de cárcel. Además han sido acusados el director de márketing Finn Batato, alemán de 38 años; Julius Bencko, diseñador, de 35 años y ciudadano de Eslovaquia; Sven Echternach, director de desarrollo de negocio, alemán de 39 años; Mathias Ortmann, director técnico, cofundador y director, alemán de 40 años; Andrus Nomm, programador, de 32 años y ciudadano de Estonia; y Bram van der Zolk, programador, holandés de 29 años. En el mismo momento en el que Estados Unidos debatía la ley SOPA, que permitirá cerrar páginas web de descarga ilegal, el FBI demostró que no le hace falta una ley para perseguir lo que considera una actividad ilegal. Los agentes llevaban cinco años examinando los correos electrónicos y las transferencias de los administradores de Megaupload, incluso llegó a avisarles de que estaban siendo investigados y les comunicó que había en sus servidores 39 películas protegidas por las leyes de propiedad intelectual. Un año después 36 de las 39 películas continuaban alojadas en sus webs. De la misma forma, 2009 Warner Brothers Entertainment envió un correo a Megaupload quejándose de la gran cantidad de copias ilícitas de archivos que tenía a ese sitio web. Warner podía eliminar hasta 2.500 copias diarias, pero quería retirar todas sin límite, petición que fue denegada por su fundador. Finalmente, el departamento de Justicia decidió actuar. La policía de Nueva Zelanda ha revelado que asaltó la casa del fundador con helicópteros ya que “Dotcom” se negaba a dejarles entrar. "Pese a que nuestros agentes se habían identificado claramente, el señor “Dotcom” se metió en la casa y activó varios mecanismos electrónicos de cierre", según explica un responsable de la Agencia para el Crimen Financiero de Nueva Zelanda a Reuters. Una vez dentro, los policías se incautaron de 10 millones de dólares neozelandeses (unos 6,2 millones de euros), un Cadillac rosa y un Rolls-Royce Phantom Drophead Coupe, dos armas de fuego y varios equipos informáticos. Tras su detención, el pasado viernes, el tribunal decretó prisión preventiva para Schmitz y para tres directivos de la empresa. El cierre y la detención de los dueños de Megaupload se siguieron con mucha atención en la sede social de la empresa Burn Media S.L., en Madrid, dueña del dominio Seriesyonkis.com, página desde la que muchos españoles se descargaban el contenido de Megaupload. Pero, a pesar de este duro golpe para los piratas de la red, los internautas no se rinden. Tras el cierre de estas páginas los usuarios siguen buscando otras formas de descargarse contenido ilegal de la red. Las alternativas son varias: Downupload, bitshare, filejungle, fileserve, filesonic... Una simple búsqueda en Google pone de manifiesto que la lucha contra la piratería no es tarea fácil.