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ELECCIONES GENERALES

Rajoy asciende a Gallardón y Sáenz de Santamaría con las listas del PP

Por LaSemana.esTiempo de lectura3 min
España13-10-2011

Era un secreto a voces hasta que el PP lo ha confirmado. Alberto Ruiz-Gallardón será diputado. Mariano Rajoy lo ha incluido en las listas al Congreso para las elecciones generales. El alcalde de Madrid, quien hace veinte años reconocía abiertamente su deseo de ser presidente del Gobierno, da por fin el salto a la política nacional. Lo de dirigir La Moncloa tendrá que esperar.

Alberto Ruiz-Gallardón y Soraya Sáenz de Santamaría son los dos nombres propios en las listas electorales del PP. Mariano Rajoy les ha colocado, respectivamente, en el cuarto y segundo puesto en la candidatura al Congreso por la circunscripción de Madrid. El gesto parece un preludio de la confianza que Rajoy puede depositar en ellos si gana las elecciones generales, preside el Gobierno de España y tiene que nombrar ministros. Gallardón ya intentó colarse en las listas al Congreso hace cuatro años. Entonces, todo hacía indicar que Rajoy perdería las generales de 2008 y, justo después, habría que elegir a un nuevo líder del PP. Esperanza Aguirre se dio cuenta de las intenciones ocultas de Gallardón y lanzó un órdago. Si Gallardón entraba en las listas, ella renunciaba a la Presidencia de la Comunidad de Madrid y se presentaba también. Rajoy zanjó aquel debate con una decisión tan salomónica como gallega: dejó fuera a los dos y se aseguró permanecer otros cuatro años al frente de la oposición. Ahora, la situación ha dado la vuelta. Las encuestas auguran un triunfo por mayoría absoluta de Mariano Rajoy en las elecciones del próximo 20 de noviembre. Gallardón y Aguirre no constituyen esta vez ninguna amenaza. Así que el alcalde de Madrid no ha encontrado vetos a sus planes y Aguirre se conforma con seguir al frente de la Comunidad. Lo más que está en juego en estos momentos es ser ministro y Aguirre ya lo fue hace 16 años con José María Aznar. El único que parece tener prisa por serlo es Gallardón, quien con toda probabilidad dejará el Ayuntamiento de Madrid en manos de Ana Botella si Rajoy le mete en el Ejecutivo. Soraya suena como vicepresidenta La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, es la verdadera estrella de la lista de Rajoy. Sin embargo, el morbo periodístico que genera la inclusión de Gallardón la hace pasar más desapercibida. La que muchos llaman la niña de Rajoy asciende de forma fulgurante entre los candidatos. En 2004 ocupó el puesto 19 en las listas del PP. Ahora es la segunda, sólo por detrás del propio Rajoy. Sáenz de Santamaría acumula en apenas dos legislaturas una carrera política fulgurante. De asesora en el gabinete de Rajoy ha pasado a ser la portavoz en el Congreso y el ariete de la oposición contra todos los vicepresidentes que ha tenido Zapatero: primero María Teresa Fernández de la Vega, después Alfredo Pérez Rubalcaba y ahora Elena Salgado. Los tres han sufrido los ataques de la vallisoletana en cada sesión de control al Ejecutivo. En los mentideros del PP se especula con la más que probable posibilidad de que Sáenz de Santamaría sea la vicepresidenta primera del Gobierno de Rajoy cuando llegue a La Moncloa. Es una persona de su máxima confianza y lealtad. Es seria, formal y tiene una inmensa capacidad intelectual, de las que gustan a Mariano Rajoy. Lo tiene todo para convertirse en la persona de referencia del próximo Gobierno. Entre los cinco primeros puestos de la lista de Mariano Rajoy hay otras dos personas de su entera amistad. Por un lado, la vicesecretaria general de Organización, Ana Mato, que lleva cuatro años dirigiendo en realidad las riendas del PP ante el exceso de trabajo de la secretaria general, María Dolores de Cospedal. Por otro lado, en el quinto puesto, queda Miguel Arias Cañete. Fue ministro de Agricultura con Aznar pero su verdadera virtud en estos tiempos es la cercanía con Rajoy. Ambos se conocen hace décadas y confían plenamente el uno en el otro. De hecho, durante estos años Arias Cañete se ha encargado de aprobar todas las listas electorales del PP por indicación del propio Rajoy. Tenía el puesto más delicado del partido y ha cumplido. Seguramente, Rajoy sabrá recompensarle la próxima legislatura.