sesión de control al Gobierno

Última sesión de control en el Congreso para Zapatero

Por Caterina Crespo2 min

España21-09-2011

Este miércoles ha tenido lugar, la última sesión de control al Gobierno en el Congreso para el que hasta hace dos meses era el número uno del PSOE, y que con la anticipación de las elecciones, dejo claro que el relevo en el partido lo tomaría de cara a las primarias Pérez Rubalcaba. Rodríguez Zapatero, ha reconocido que sentirá nostalgia y que sabe que quedan muchas cosas por hacer. A priori se ha entendido que hablaba de reformas, las cuales no por falta de oportunidades, no ha tomado. Deja a su paso cinco millones de parados y una enorme deuda pública. De los cuales también se ha referido. Rodríguez, se siente responsable de los casi cinco millones de parados que deja, sensación que comparte el resto del equipo económico gubernamental que ha reconocido que han quedado cosas por hacer.

Aunque Zapatero ha asumido su responsabilidad en esta situación, ha hecho hincapié en que es consecuencia de una grave crisis económica mundial que nadie pudo prever (según este, porque los economistas llevaban tiempo anticipándola) y ha defendido las medidas adoptadas, al tiempo que ha advertido al presidente del PP, Mariano Rajoy, que la ciudadanía reclama responsables políticos que aporten soluciones y no sólo ataques. Por su parte, Mariano Rajoy, ha aprendido varias lecciones del gobierno de Zapatero. “No se puede gastar lo que no se tiene, hay que ser modesto, reconocer la realidad, hay que hacer reformas...” Estos son sólo algunos de los puntos que el presidente del PP ha recordado en los pasillos del Congreso tras su cara a cara con el presidente. Rajoy advierte que: “Zapatero deja una herencia mala” pero, personalmente, le ha deseado la mejor de las suertes. Durante la última sesión de control al Gobierno en el Congreso, el PP ha instado al Ejecutivo a hacer balance económico de una legislatura que deja la "herencia envenenada" de cinco millones de parados, un alto desempleo juvenil y unas cuentas públicas basadas en unas previsiones macroeconómicas que ya nadie cree que se puedan cumplir. Hasta siete lecciones ha enumerado el líder del PP, Mariano Rajoy, que, en su opinión, ha dejado escritas José Luis Rodríguez Zapatero en su "herencia envenenada" para la posteridad. Rajoy afirma haber tomado buena nota de todas ellas y se apresura a actuar en consecuencia si es que finalmente gana las elecciones y llega a La Moncloa. Los siete mandamientos para Rajoy son a partir de ahora: Hacer un buen diagnóstico y no engañar, gobernar con un plan y no a golpe de ocurrencia no generar falsas expectativas, hacer previsiones razonables, no gastar lo que no se tiene, hacer reformas y no vivir de la herencia y de la inercia, y por último, no gobernar por decreto ley. Las palabras del todavía presidente han sido: "El combate ha sido durísimo contra una gravísima crisis y el Gobierno ha afrontado su responsabilidad para preservar al máximo la cohesión social y garantizar que la moneda común pueda seguir adelante". Pobres explicaciones pero no hay ya tiempo para más. Este ha sido el último cara a cara entre Rajoy y Zapatero.