RUPTURA DIÁLOGO SOCIAL
La reforma de la negociación colectiva está en manos del gobierno
Los líderes de UGT y CCOO, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo (FOTO: Comisiones Obreras)
Por Rocío Linares
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Economía02-06-0111
Por unos y por otros y el acuerdo sin cerrar. Ya no hay conversaciones interrumpidas o debilitadas, sino rotas. Con un esfuerzo pedagógico de por medio que ha costado meses, al final el gobierno cumplirá la advertencia de firmar la reforma al margen de los frutos del diálogo. El pacto se quedó a “un cuarto de hora de firma” aunque los puntos de acuerdo conseguidos hasta el momento figurarán en la propuesta del ejecutivo.
El “equilibrio” entre flexibilidad interna en las empresas y la protección de los derechos de los trabajadores será el objetivo del documento que pondrá fin a un diálogo social fallido. Valentía es lo que se reclaman ambas partes que reconocen el fracaso en su dialéctica pero no abandonan sus posturas frente a la reforma laboral. Para la CEOE el problema es que los sindicatos han sido “demasiado prudentes”. Los sindicatos por su parte se excusan alegando que no han sido “ingenuos” al no aceptar exigencias de última hora que ha incorporado la CEOE. A pesar de que cedieron en algunas materias consideran que un sector de la organización de los empresarios ha provocado una división interna, después del rescate a Portugal y las elecciones del 22 de Mayo, que ha afectado a las propuestas del colectivo. El jefe de la Patronal, Juan Rosell, ha defendido que “ha habido cambios de planteamiento para adecuarse a la legalidad, pero no cambios en las líneas maestras”. El gobierno firmará “Ahora el Gobierno lo tiene muy fácil, no ha estado lejano de las conversaciones y, por tanto, conoce las propuestas”, opina Rosell. Los sindicatos añaden que “observarán” el documento final para asegurarse de que se cumplan los convenios sobre los trabajadores. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ya había advertido de que el ejecutivo aprobaría la reforma de la negociación colectiva el próximo viernes, día 10 de junio, si no se había dado el acuerdo entre los sindicatos y la patronal. Ha sido un reto para los agentes sociales. Después del optimismo de las últimas conversaciones, se agotaba el tiempo sobre la decisión final y lo que parecía estar ya sobre papel, se lo ha llevado el viento.