INFLACIÓN

El Banco Central Europeo sube los tipos de interés

Por Caterina Crespo3 min

Economía07-04-2011

El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido subir los tipos de interés de la zona euro en un cuarto de punto, hasta el 1,25%, después de casi dos años en mínimos históricos, esta medida fue prevista por el presidente, Jean Claude Trichet, hace mas de un mes. Con esta decisión, los tipos de interés abandonan su nivel más bajo de la historia, donde permanecían desde el mes de mayo de 2009 con el objetivo de apoyar la recuperación de la economía de la eurozona.

Decisión que en la rueda de prensa concedida por el presidente de la BCE se presentó como posible pero no segura. En los últimos días los analistas consideraban que esta subida estaba prácticamente asegurada y resaltaban que no será la última que se lleve a cabo antes de que acabe 2011. La inflación de la zona euro se situó en marzo en el 2,6%, dos décimas por encima del dato del mes anterior, según la estimación adelantada de la oficina europea de estadística, Eurostat. Decisión del Banco Central Europeo (BCE) que ha sido anticipada con relativamente precisión. Más de 140 expertos fueron consultados por Bloomberg y Reuters. España La noticia es muy negativa para el ámbito nacional. Y sus consecuencias van a ser directas en el bolsillo de todos los ciudadanos. Menos renta disponible, menos consumo y menos inversión. Inflación condicionada por el precio de carburantes y alimentos. De hecho los expertos de IG Markets, advierten que la subida del precio del dinero es extremadamente negativa. Hipotecas más caras. En primer lugar, se encarecerá el precio de las hipotecas, ya que el Euribor, el tipo de referencia para calcular los préstamos hipotecarios, aumentará del 2,04% actual al 2,75% a final de año, según prevén los analistas. Si con el Euribor en el entorno del 2%, las hipotecas suben de media 600 euros al año, las familias tendrán que hacer cálculos para asumir nuevos encarecimientos de las cuotas. Esto significa que los hogares tendrán menos renta disponible y por tanto seguirán tirando del ahorro y consumirán aún menos. Subida de tipos para controlar la inflación de la Eurozona, que alcanzó en marzo el 2,6%, y evitar el incremento que ya se advierte por el aumento del precio de las materias primas (petróleo, alimentación o por ejemplo el cobre). EL BCE pretende que el IPC se mantengan por debajo del 2%. Trichet quiere frenar la tendencia inflacionista provocada por la subida del precio del crudo, que ha tocado máximos al alcanzar los 122 dólares el barril. Menor poder adquisitivo. Con el precio del dinero al 1,25% y una inflación al 3,6%, los tipos de interés reales son negativos, es decir, que disminuye la capacidad adquisitiva por ahorrar, algo difícil de mantener en el largo plazo. Además, el BCE tiene intención de seguir subiendo los tipos con lo que el esfuerzo de compra se endurecerá aún más. Más paro. La pérdida de poder adquisitivo contraerá el consumo y la inversión. Esto hará que se cree menos empleo y que aumente aún más el paro. Las empresas españolas también resultarán afectadas, particularmente las pymes, ya que a la dificultad actual de no poder obtener financiación se une ahora que el escaso dinero disponible en el mercado será más caro. El BCE sube los tipos porque el mercado laboral europeo ha mejorado. En febrero, la tasa de paro de la eurozona bajó hasta el 9,9%. Países como Alemania, Francia e Italia han logrado disminuir sus cifras de desempleo. Pero, no es el caso de España, que cuenta con una tasa superior al 20% y más de cuatro millones de parados. En la subasta de este jueves, el Tesoro Público ha adjudicado 4.129,67 millones de euros en bonos a tres años, con un interés marginal del 3,601%, ligeramente por debajo del 3,609% aplicado en la anterior subasta de esta denominación. Es la primera que el Tesoro celebra en abril, y se ha llevado a cabo horas antes de que el Banco Central Europeo (BCE) elevara los tipos de interés en la zona del euro y un día después de que Portugal reconociera el fracaso de su política económica y pidiera ayuda a la Unión Europea. El importe solicitado por las entidades -7.401,70 millones de euros- prácticamente ha duplicado las previsiones, ya que el Estado esperaba colocar entre 3.500 y 4.500 millones de euros.