TERRORISMO

Los presos de ETA rechazan beneficios a cambio de abandonar la banda

Por Marta J. Funes2 min

España24-12-2010

El autodenominado Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK) ha acusado al Gobierno, a través de un comunicado que ha publicado el diario Gara, de tratar de convencerles para abandonar la banda terrorista a cambio de beneficios penitenciarios y mejores condiciones de vida.

En el comunicado, en el que no se refieren a ETA en ningún momento y tampoco rechazan la violencia, los presos han denunciado que el Gobierno enviase “representantes a las puertas de las celdas” y la constancia con la que reciben “propuestas, chantajes y amenazas” y aunque, según ellos, no se trata de “un juego nuevo”, si han notado como el número de visitas se ha incrementado durante los últimos meses. El colectivo pide al Gobierno que abandone el intento de lograr que el colectivo se aparte de la banda terrorista y recuerdan a España y Francia que sus principios no les permiten aceptar la propuesta. “Nos ofrecen opciones de salir de la cárcel y de aliviar nuestro modo de vida a cambio de dejar EPPK, dar paso al arrepentimiento político y dejarles exhibirnos como trofeos conseguidos en un safari. Para quienes mantenemos nuestros principios y dignidad y no aceptamos ese camino, en cambio, el empeoramiento de las condiciones es automático", declararon. Los presos han solicitado un “compromiso sincero y práctico por parte de todos”. "Tendemos la mano a los ciudadanos vascos que son activos directos y a todos los agentes, sobre todo al colectivo de exiliados políticos, al que sentimos muy cerca", han asegurado. Este comunicado podría ser causa de la ascendente preocupación de la banda, ya que de los más de 600 presos etarras que se encontraban encarcelados en España, más de un centenar han abandonado el grupo terrorista y alrededor de una veintena, entre ellos históricos dirigentes de ETA como José Luis Álvarez Santacristina, 'Txelis' o Idoia López Liaño, 'la Tigresa' han firmado la “carta de arrepentimiento”, un documento en el que lamentan “el daño causado a personas inocentes, a sus familias y a la sociedad”. Los presos de ETA también han recalcado su intención de tener una participación activa en el nuevo “cambio político” y han asegurado que su deber es “activar su carácter político e incidir”. “Habrá iniciativas, mostrando nuestro propio punto de vista, poniendo sobre la mesa aportaciones. Sin ninguna duda, tenemos que fortalecer las relaciones entre los agentes", han explicado.