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ARGENTINA

Néstor Kirchner, una vida dedicada a la política

Por Paloma BulnesTiempo de lectura2 min
Internacional27-10-2010

Néstor Carlos Kirchner Ostoic fue un político y abogado argentino perteneciente al Partido Justicialista y al Frente para la Victoria. Fue presidente de Argentina desde el 25 de mayo de 2003 hasta el 10 de diciembre de 2007. Desde el 4 de mayo de 2010 desempeñó el cargo de secretario general de Unasur.

Néstor Kirchner nació el 25 de febrero de 1950 en Río Gallegos (Patagonia). Fue miembro de la Juventud Peronista y estudió Derecho en la Universidad Nacional de La Plata. En 1975, se casó con la militante justicialista Cristina Fernández. Formaron parte de la corriente izquierdista que apoyó a los Montoneros en los años turbulentos que precedieron al golpe de estado militar que derrocó a la presidenta María Estela Martínez de Perón. A finales de 1983, fue designado presidente de la Caja de Previsión Social de Río Gallegos. Durante los siete años de dictadura militar (1976-1983) se mantuvo aparentemente alejado de la política. En las elecciones municipales de septiembre de 1987, fue elegido intendente de Río Gallegos. Debido a su buena gestión, fue promovido por el Partido Justicialista a candidato para la gobernación de la provincia, cargo para el que fue elegido con el 61 por ciento de los votos el 8 de septiembre de 1991. Aplicó una política expansionista, de fuertes inversiones públicas. Entre sus medidas destacan: la reforma en dos ocasiones la Constitución provincial para que el gobernador pudiera ser elegido sin límite de mandatos y el aumento del número de jueces del Tribunal Supremo provincial. Esto le trajo problemas. Sus partidarios admiraban su eficaz gestión, mientras que sus adversarios opinaban que todas las fuentes de riqueza y trabajo estaban en manos del gobernador y sus seguidores. Durante la campaña electoral para la Presidencia del Gobierno, se presentó como un líder de la izquierda peronista. Prometió mantener en el cargo al ministro de Economía, Roberto Lavagna, al que se atribuía la ligera mejoría económica de los primeros meses de 2003. En su discurso de investidura, Kirchner reafirmó el papel central del Estado en el desarrollo económico, prometió una lucha contra la corrupción y abogó por un reforzamiento del Mercado Común del Sur. Las primeras medidas que tomó como jefe de Estado fueron: el decreto de la mitad de los generales y almirantes, proceder a una amplia purga en la policía federal, sospechosa de corrupción, y abrir los archivos secretos sobre el atentado contra la sede de la Asociación Mutual Israelí Argentina en Buenos Aires, que causó la muerte de 95 personas e hirió a varios centenares en julio de 1994. También anunció su propósito de jubilar a varios de los jueces del Tribunal Supremo.