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FÓRMULA 1

Red Bull y Alonso dan un ‘golpe de teatro’ en Yeongam

Por Roberto J. MadrigalTiempo de lectura6 min
Deportes24-10-2010

Fernando Alonso asaltó el liderato del Mundial en un circuito complicadísimo por la lluvia, el desgaste de los neumáticos y la falta de visibilidad. Lo hizo por el infortunio de Red Bull, incapaz de plasmar en la carrera su dominio en la calificación: ni Mark Webber ni Sebastian Vettel pudieron cruzar la meta, con lo que el español y Lewis Hamilton -segundo- se enganchan a la lucha por el campeonato. Felipe Massa completó el podio, tercero.

Las prisas por concluir el circuito en los días previos a la carrera no tuvieron en cuenta las previsiones de lluvia. Aun sin precipitaciones excesivamente intensas, la falta de drenaje del asfalto -recién puesto, sin esperar a los tres meses que son habituales en otros circuitos- y la tierra, muy blanda fuera del alquitrán, hicieron que durante 17 vueltas la carrera fuera un paseo tras el coche de seguridad. Eso sí, con un parón de casi una hora después de los tres primeros giros. La dirección de carrera, encabezada por Charlie Whiting, pecó de prudente y mantuvo en pista al coche plateado Bernd Mäylander durante 16 vueltas, aun cuando los pilotos ya comunicaban por radio a sus equipos que la pistaba estaba lista, incluso para los neumáticos intermedios. La salida lanzada perjudicaba en principio a Fernando Alonso, que no consiguió -como pretendía- atacar a los Red Bull en la tercera curva, tras la larguísima recta de 1,2 kilómetros. Ahora bien, tampoco tuvo la amenaza de Lewis Hamilton, que fue superado por Nico Rosberg, mientras que Michael Schumacher daba cuenta del polaco Robert Kubica, en la lucha por la octava posición. Pero la pista, muy delicada, reservaba un golpe de efecto. Mark Webber, dos segundos más lento que Vettel, se salió de la trazada y pisó la hierba artificial en plena aceleración, por lo que cometió un trompo y se fue contra el muro en la 13ª curva. Alonso lo evitó como pudo, pero no Rosberg, que chocó contra él y obligó a una nueva salida del safety car. En la nueva retomada, tampoco hubo cambios en las posiciones delanteras. Tan sólo Schumacher adelantó a Jenson Button, mientras que por detrás, los pilotos empezaban a calzar neumáticos intermedios. Con todo, la pista continuaba deslizante y hubo numerosos trompos y accidentes, que se cobraron los abandonos del italiano Jarno Trulli -que se tocó con Bruno Senna-, del brasileño Lucas di Grassi, que se fue recto en una frenada y se empotró contra las protecciones, así como del suizo Sébastien Buemi, que también se coló en otra frenada y se llevó por delante al alemán Timo Glock, por lo que hubo una nueva entrada del coche de seguridad. La interrupción sirvió para que todos los pilotos con opciones de puntuar cambiaran neumáticos. Alonso y Vettel entraron una vuelta más tarde que los demás, pero mientras que el alemán logró regresar en cabeza, el español perdió tiempo por culpa de una tuerca -salió con la rueda y el mecánico tuvo que buscar otra- y volvió tercero, por detrás de Lewis Hamilton. Pero en la reanudación, el británico se pasó de frenada en la primera curva y el español de Ferrari logró recuperar la segunda posición. Luego, trató de apretar el ritmo para acercarse a Vettel, pero éste respondió mientras le aguantó el motor. La sorpresa llegó en la vuelta 46, cuando -con los neumáticos en las últimas y perdiendo visibilidad a cada minuto- el coche del alemán largó una nube de humo blanco, con lo que Alonso y Hamilton daban un golpe de mano a la clasificación del Mundial. También hubo mucho bacalao en el pelotón, con Kamui Kobayashi y Adrian Sutil -demasiado impulsivo, tanto que acabó por abandonar tras casi llevarse puesto al japonés- y como grandes animadores, a cuenta de sus adelantamientos, pero también -por asumir tantos riesgos- de sus excursiones por las escapatorias, que dieron premio al japonés con el último punto en juego y dejaron como gran perjudicado a un Button que, décimo quinto, queda prácticamente descartado en la lucha por el campeonato. Más aún, pese al empujón de Hamilton cuando la visibilidad ya empezaba a ser reducida, dado que los McLaren están un paso por detrás de Red Bull y Ferrari en su rendimiento. Renault hizo una carrera discreta, con un Vitaly Petrov que perdió el control de su monoplaza y lo destrozó en la última curva, a falta de 16 vueltas para el final. Lo enmendó Kubica, superado por los Williams y condenado a la octava plaza, hasta que los problemas de neumáticos de Nico Hulkenberg y Rubens Barrichello le permitieron recuperar hasta la quinta posición, un resultado excelente para unas condiciones tan difíciles. Williams logró salvar un punto in extremis con un cambio de neumáticos a Hulkenberg, que arrebató en la última vuelta la décima posición a Jaime Alguersuari. Aun así, perdieron una ocasión pintiparada para superar a Force India en la clasificación de constructores.

Clasificación del Mundial

tras el G.P. de Corea

Pilotos Puntos Constructores Puntos
Fernando Alonso 231 Red Bull 426
Mark Webber 220 McLaren 399
Lewis Hamilton 210 Ferrari 374
Sebastian Vettel 206 Mercedes GP 188
Jenson Button 189 Renault 143
Felipe Massa 143 Force India 68
Robert Kubica 124 Williams 65
Nico Rosberg 122 Sauber 43
Michael Schumacher 66 Toro Rosso 11
Rubens Barrichello 47 Lotus 0