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CUBA

Cuba avanza en el tiempo pero su población retrocede

Por Rocío LinaresTiempo de lectura2 min
Sociedad10-09-2010

Lo que en 1959 fue recibido con júbilo, la Revolución de Fidel Castro y su posterior dictadura, sería muchísimos años después, públicamente reconocida como “un modelo que ya no funciona”. A finales de los años 80 parecía que Cuba dejaba atrás el tercer mundo para formar parte del grupo de países del segundo mundo.

Países que están en la lucha por ascender, en la lucha por competir con los más grandes. Países que están en desarrollo para dar lo mejor a su población. Sin embargo, las relaciones comerciales cesaron en un 80% por ciento, provocando una profunda crisis económica que hundió el país. El panorama ofrecía una carencia de lo más elemental, una insuficiencia grave para satisfacer las necesidades básicas. Esta imagen poco ha cambiado hoy. Siglo XXI para el primer mundo, pobreza para los cubanos. Estados Unidos, potencia económica mundial, cortó las relaciones comerciales con Cuba desde 1960 mediante un embargo. Un “castigo” que impedía las transacciones económicas entre cubanos y estadounidenses. Este embargo es el más largo conocido en la historia y además condenado por las Naciones Unidas. En la actualidad hay una serie de regulaciones comerciales, por ejemplo, Cuba tiene que pagar en efectivo y al contado todos los productos que importa desde EE.UU porque no conceden créditos financieros. A pesar de mantener esta limitación, EE.UU. es uno de los principales socios comerciales de Cuba. Entre sus competidores, le sigue muy de cerca la Unión Europea, segundo mayor exportador de productos agrícolas hacia Cuba. Desde 2003 existe una Delegación de la Unión en La Habana. El objetivo principal era crear y fortalecer relaciones con el país y así también colaborar por el desarrollo de la población. Sin embargo, durante ese mismo año y por hostigamiento a la disidencia cubana se impusieron unas sanciones que eliminaron cualquier relación diplomática. La relación se reanudó cinco años más tarde pese a las presiones de EE.UU. En la actualidad, la industria privada ha sido legalizada. La economía ha recibido un ligero impulso que ha permitido la incorporación de algunas novedades, especialmente en el sector turístico, una vía de ingresos fijos para el país que atrae a centenares de turistas por sus playas y clima para el disfrute en épocas estivales o incluso durante cualquier mes del año. El dólar se ha convertido en la segunda moneda para sectores de la población pues las fuertes desigualdades entre las familias y sus posibilidades ha creado problemas en todos los tiempos. Los problemas internos y externos golpean el país que se encuentra profundamente debilitado. La mayor riqueza que hoy conserva Cuba, tal vez sea la esperanza de prosperar y el recuerdo “de los tiempos mejores”. La solución podría estar en el consejo de Juan Pablo II en el año 1998. “Que Cuba se abra al mundo y el mundo se abra a Cuba”. En su momento supuso un cambio con respecto a las relaciones internacionales. Ahora más que nunca los cubanos necesitan una unión a nivel mundial para recibir de los más poderosos que comienzan a salir de la crisis.