PLAN HIDROLÓGICO

El nuevo trazado del trasvase del Ebro reduce el impacto ambiental

Por Aarón Abad1 min

Sociedad07-03-2002

El proyecto “definitivo” del trasvase del Ebro está a la espera de la evaluación de impacto ambiental de cada parte del trazado, pero el ministro de Medio Ambiente, Jaime Matas, se manifiesta muy optimista y orgulloso del nuevo trazado. Si todo sigue su curso estará listo en 2008 y el presupuesto no ha variado.

Aunque el nuevo recorrido cuente con menos kilómetros y una buena parte de ellos ya estén construidos, para evitar el paso por ciertas zonas protegidas e incluidas en la Red Europea Natura 2000 habrá que construir más túneles y algunas infraestructuras que requieren una gran inversión. Por esto el presupuesto inicial no varía, seguirá siendo de 4.200 millones de euros (700.000 millones de pesetas), un 30 por ciento de los cuales se financiarán con fondos europeos, según el ministro. Todavía quedan algunos puntos por cerrar en el trazado. No está claro si las aguas del Ebro se extraerán a la altura de Cherta o aguas abajo en Tortosa. El curso medio del Segura tampoco está definido. Se barajan tres alternativas para alcanzar el embalse del Talave. Dos de ellas pasan por el curso medio del río Ojós y cuentan con infraestructura ya existente. Las principales críticas al nuevo proyecto vienen de parte del PSOE, cuya responsable de Medio Ambiente, Cristina Narbona, asegura que “No cuadran las cuentas. Además, no responden a la realidad, pues será mucho más caro”. Según el PSOE, en un futuro habrá que subir el precio del agua y la falta de presupuesto inicial irá contra los usuarios. Además Narbona cree que las expectativas de que va a haber agua en abundancia no son ciertas. La gestión del proyecto ha pasado a manos de la sociedad Infraestructuras del Trasvase, S.A. (Intrasa), dirigida por Sergio Beltrán.