TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Zapatero entona y reparte el 'mea culpa' en la no renovación del TC

Por Miguel Martorell2 min

España21-04-2010

La renovación del Constitucional se ha convertido en un nuevo frente abierto entre el PSOE y el PSC. Mientras que los segundos defienden su renovación, pendiente desde hace un año, los primeros no creen que sea el momento. El presidente del Gobierno, por su parte, ha resaltado que la culpa del estado actual del órgano es de los partidos.

En respuesta a una pregunta de ICV en el Congreso de los Diputados, José Luis Rodríguez Zapatero ha reconocido que la renovación del TC es "tan urgente" como "hace seis meses" y ha asegurado que desde el PSOE seguirán "trabajando" para conseguirla. "Vamos a ver si es posible", ha señalado, no sin olvidarse de recordar que para ello se requiere una mayoría cualificada, es decir, con el apoyo del PP. En este sentido, ha querido dejar claro que la culpa de la no renovación no es del TC, como podría parecer por los ataques que éste ha recibido en los últimos días, sino de los partidos. Eso sí, también ha subrayado que "mientras se produce la renovación, el tribunal tiene plena legitimidad". "Respetemos su tarea y la institución", ha añadido, para tratar de apaciguar los ánimos en torno a un organismo que debe emitir una sentencia decisiva para el Estatut de Cataluña y su desarrollo. El debate se produce en medio de una nueva brecha abierta entre el PSOE y los socialistas catalanes. Su líder, el president de la Generalitat, José Montilla, está en negociaciones con el resto de formaciones del arco parlamentario para impulsar la renovación del órgano. Para ello, el Parlament aprobará la semana que viene una declaración solemne reclamando su renovación antes de que se pronuncie sobre el Estatut. Si CiU apoya el movimiento, el 88 por ciento de la Cámara catalana aprobaría la declaración, quedando sólo excluidos el PP y Ciutadans. Pero, con las elecciones autonómicas de Cataluña a las puertas, CiU no está dispuesta a perder comba y tiene la intención de presentar una iniciativa en el Congreso de los Diputados que pretende reformar el Tribunal Constitucional. El objetivo de la misma es impedir que los magistrados que han cumplido su mandato continúen tomando decisiones en el mismo. De presentarse, los socialistas estarían en un aprieto, pues el PSC podría decantarse por apoyar una iniciativa que el resto del PSOE rechaza y esa es, precisamente, la baza con la que juega CiU para demostrar quién está dispuesto a sacrificar más por Cataluña antes de las próximas elecciones.