CUBA
Cuba mantiene encarcelados a cerca de 200 presos políticos
Por Juan Heralta Rodríguez2 min
Internacional28-02-2010
Cuba mantiene alrededor de 200 presos políticos en la cárcel del país. Por este motivo, gobiernos, instituciones y organizaciones internacionales claman por una liberación del pueblo cubano. Es por eso que cuatro presos que formaban parte del grupo de 75 opositores detenidos y sentenciados a penas de hasta 28 años de prisión han intentado coger la sartén por el mango iniciando una huelga de hambre para cambiar esta situación. Desde la reestructuración del Gabinete de Raúl Castro, no se han producido cambios en Cuba.
Ni uno, ni diez, ni cincuenta, sino que hasta 200 presos políticos están en cautividad en el Gobierno de Raúl Castro. La salida de Fidel Castro no ha cambiado la situación y Cuba mantiene los mismos derechos civiles, políticos y económicos, a pesar de que hace un año Raúl Castro decidió reestructurar su gabinete político. Para Elizardo Sánchez, miembro de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHyRN), “nada indica que los actuales gobernantes estén dispuestos a iniciar las reformas jurídicas, económicas y políticas que necesita el país”. Ya en el año 2009 se produjeron al menos 869 casos de disidentes políticos detenidos, aunque ninguna ejecución bajo la pena de muerte, pese a que la máxima pena sigue vigente en el código penal cubano. Para Sánchez, la “reconciliación nacional, es el camino para mejorar las relaciones entre los ciudadanos con el gobierno comunista. Hay una carga de odio muy grande en la nación cubana, son décadas de enfrentamiento aquí o allá, el lema de este año es la idea de reconciliación nacional... es complicado” y la clave es “perdonarnos, los unos a los otros”. Pero cansados de esperar una solución que nunca llega, un psicólogo disidente y cuatro presos políticos decidieron iniciar por separado una huelga de hambre. Los cuatro formaban parte del grupo de 75 opositores condenados a prisión durante 28 años en la denominada "primavera negra" de 2003, en la que fueron acusados por el Gobierno de mercenarios al servicio de Estados Unidos. Sánchez les ha aconsejado que la abandonen puesto que considera que dichas huelgas no tienen efecto alguno en el Ejecutivo que preside en general Raúl Castro. El primero en iniciar la huelga de hambre fue el psicólogo, tras ser detenido y golpeado el pasado jueves por agentes de la seguridad del Estado cuando iba de camino al sepelio de Zapata.