Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

LA FIESTA, EN JAQUE

Las primeras consecuencias en caso de abolir los toros

Por LaSemana.esTiempo de lectura1 min
Espectáculos19-12-2009

Con el debate encendido en Cataluña acerca de la prohibición de las corridas de toros, los empresarios del sector ya han comenzado a presentar batalla. Advierten que, de prosperar la ley, solicitarán fuertes indemnizaciones por las pérdidas ocasionadas, a la vez que dibujan las primeras consecuencias que traería la abolición.

El portavoz de la Mesa del Toro, Martín Peñato, alegó esta semana que "un movimiento de este tipo, independientemente de un ataque a la libertad, lleva consigo consecuencias de perjuicios económicos, sociales, culturales y ecológicas, entre otras cosas." Los taurinos se preguntan por lo que pasaría con las alrededor de 540.000 hectáreas dependientes del mundo del toro, ricas en flora y fauna, en caso de prohibirse la fiesta. Algunos vaticinan que las grandes dehesas acabarían dando paso a expltaciones agrícolas en las que el propio toro bravo no tendría cabida. Pero, amén de las consecuencias ecológicas, los taurinos hacen alusión a otras que en Cataluña se verían bastante antes: las económicas. Ganaderos, empresarios del sector o veterinarios verían cómo sus ingresos se reducirían sustanciosamente. La organización de eventos taurinos en La Monumental de Barcelona cuesta al año cinco millones de euros. De media, cada uno de los festejos cuesta algo más de 200.000 euros que abona Funciones Taurinas, el gestor de la plaza. Amén de esas cantidades, que revierten en empresas del sector, el colectivo taurino catalán advierte que, durante la temporada, el coso barcelonés se llena en un amplísimo porcentaje con gente de fuera, de alto poder adquisitivo, y que dejaría huérfanos hoteles, restaurantes y otros establecimientos turísticos.