XENOFOBIA
Condenado a 26 años de prisión el asesino de Carlos Palomino
Por Miguel Martorell2 min
Sociedad19-10-2009
La Audiencia Provincial madrileña le impone a Josué Estébanez 19 años de prisión por un delito de asesinato con la agravante de motivos ideológicos y otros 7 años por el de tentativa de homicidio. Aunque el asesino de Carlos Palomino se ha declarado "arrepentido" por lo sucedido el 11 de noviembre de 2007, la familia de la víctima ya ha anunciado que recurrirá para pedir más años de condena.
Como responsabilidad civil por los hechos, Josué Estébanez deberá afrontar una indemnización 159.353 euros a los padres de Carlos Palomino, al que, según ha quedado probado, asesinó de una puñalada en el Metro de Madrid. El asesino, de estética neonazi, ha asegurado que apuñaló a Palomino en legítima defensa, al verse acorralado por decenas de jóvenes antifascistas que acudían a reventar una manifestación del partido de ultraderecha Democracia Nacional, a la que Josué pretendía asistir. Tanto los testigos como las cámaras de vigilancia del vagón de metro en el que ocurrieron los hechos han demostrado que Josué preparó su arma antes de que Palomino entrara en la parada de Legazpi. "Me siento arrepentido. Yo no quería quitarle la vida a nadie. Me entró mucho miedo y no supe reaccionar", ha declarado Josué en su derecho a la última palabra antes de escuchar la sentencia. Al conocerse el fallo, el presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, ha celebrado que se haya aplicado el agravante de "odio ideológico", por ser un mensaje "para todos aquellos que ejercen la violencia por motivos ideológicos". Por su parte, el abogado de la familia de Palominio ya ha anunciado que recurrirá la sentencia para pedir más pena para Estébanez, aunque también ha remarcado el hecho de que se haya aplicado el agravante. En la sentencia, la Audiencia Provincial de Madrid considera probado que el 11 de noviembre de 2007, Josué se dirigió en metro a la estación de Usera, para asistir a la manifestación convocada con el lema 'contra el racismo anti-español' por Democracia Nacional. El condenado compartía esa ideología y portaba una navaja monofilo de, al menos, siete centímetros de hoja, y un puño americano. Al llegar a la estación de Legazpi, el acusado observó que en el andén se encontraba un grupo superior a cien de jóvenes, que identificó como antifascistas por su apariencia externa que iban a boicotear la manifestación. Antes de que el tren se detuviese, sacó su navaja y la ocultó abierta. Entre los jóvenes se encontraba Palomino, quien al acceder al vagón y percatarse que la estética de Josué se correspondía con la de un skin neonazi, le preguntó sobre su sudadera de una marca que habitualmente usan personas de dicha ideología. El acusado le asestó una fuerte puñalada en el tórax que le produjo la muerte poco después por un shock hipovolémico. Sin embargo, en vez de huir, José se quedó en el interior del vagón, recorriéndolo de un lado a otro blandiendo la navaja y profiriendo contra el resto de jóvenes antifascistas frases como "guarros de mierda, os voy a matar a todos" o "Sieg Heil", grito de la Alemania nazi.