LA SITUACIÓN DEL CINE ESPAÑOL

Los grandes grupos mediáticos, al mando también del cine nacional

Por Rocío Linares Ramos2 min

Espectáculos05-10-2009

En castellano la locución tener el mando, significa tener el poder. En este caso, los que tienen el poder, no tienen solo el mando, sino las butacas y los kioscos de palomitas. Y es que las películas “made in Spain” más exitosas comparten a menudo compañía productora. Ya se sabe, más vale lo malo conocido, que lo bueno por conocer. Y no es que sean bajas de calidad por sí mismas, sino que el cine español en su conjunto, no pasa por su mejor momento recaudatorio. Contenido o calidad, criterios evaluables a gusto del espectador, que si es español, vota con un diez una parodia sobre su vida en la gran pantalla.

El más comprometido con los guiones españoles es el grupo Telecinco Cinema, los conocidos “Estudios Picasso”, que además de apostar fuerte, salen ganando pues títulos como “El orfanato”, “Alatriste” o “El laberinto del fauno”, han sido películas galardonadas y de notable reconocimiento en el mercado nacional. En producciones exitosas le sigue Sogecine, que desde Sogecable, propiedad del grupo PRISA, han llenado salas de cine y también blogs de críticas, con “Todo sobre mi madre”, “Mar adentro” o “Los girasoles Ciegos”. Los mejores títulos de la escasamente valorada lista nacional hacen crecer a los magnates de la producción que están recibiendo ataques individuales de pequeños escaladores con menos títulos, eso sí, pero de gran éxito, como es “Las 13 Rosas” desde el grupo de producción de Enrique Cerezo o “La Soledad” que lanza a “In Vitro Films” apostando por un cine nuevo, aún más documental. Era de esperar que poco a poco las producciones apuntaran a copiar la vida de un español. El cine para el que actúan Paz Vega, Santiago Segura y los protagonistas de las series más vistas en televisión, tiene, en principio, una importancia documental. Para buenos argumentos o argumentos simplemente, ya están las cabezas de los guionistas norteamericanos. Así, “Vicky Cristina Barcelona” o “Princesas” desde “Mediapro”, otro gigante detrás de las cámaras y afín al Gobierno al igual que Sogecine, o “Mentiras y gordas” saltan a la gran pantalla para dar a conocer la evolución histórica de la sociedad en España. Al menos, es una de las tareas de las producciones que intentan vender fuera de la península. Con 16 oscars en las vitrinas españolas, podemos tomar cuenta de lo que gustan las películas de Javier Bardem, Pedro Almodóvar o José Luis Garci en el extranjero. Detrás del cine que no doblamos para entenderlo hay un número escaso, pero en aumento, de máquinas que lo generan. El éxito de diversos enfoques y formas de hacer cine está en la retina del espectador, ahora mismo acostumbrada a patrones muy similares.