ABORTO

La Ley del Aborto sigue adelante con el respaldo de la mayoría del Congreso

Por Luis A. López3 min

Sociedad16-06-2009

La iniciativa del grupo mixto solicitaba al Gobierno posponer la tramitación de la reforma de la Ley del Aborto hasta que no tuviera lugar una "reflexión sosegada y el enriquecedor debate social multidisciplinar que este tema merecen". Salvador ha tratado de conseguir un "amplio consenso social, político y parlamentario" para una ocasional modificación de la ley que garantizara "el respeto a la libertad y la dignidad del ser humano" mientras recordaba que anualmente en España se realizan unos 112.000 abortos.

La moción, votada por 345 diputados, ha tenido un total de 160 votos a favor, 183 en contra y dos abstenciones. La líder de UPyD, Rosa Díez, al igual que la diputada popular Celia Villalobos, se abstuvieron de votar. De los diez diputados de CIU, ocho se unieron al PP. Las reacciones no se han hecho esperar. La diputada del PSOE y portavoz de Igualdad, Carmen Montón, ha asegurado que la moción de UPN es una artimaña para dificultar el proyecto de Ley y ha destacado que “lo que quieren es que el aborto siga en el Código Penal y las mujeres no puedan decidir sobre su maternidad”. Por su parte, la diputada del PP, Sandra Moneo, ha defendido una enmienda, no incluida en la votación, relativa a un plan con las Comunidades Autónomas para ofrecer mejor información a las mujeres sobre las posibilidades que tienen al quedarse embarazadas. Moneo, además, ha subrayado que esta ley ha provocado “una profunda fractura social y que el Gobierno la ha protegido con “premisas engañosas”. El diputado Joan Tardá, en representación de ERC-IU-ICV, ha subrayado que esta moción sólo pretendía "distorsionar el proceso" de la tramitación de una ley, y ha afirmado que no se van a conformar con lo previsto en el proyecto de reforma actual. Mientras tanto, el PNV ha coincidido en señalar que esta reforma no la presentó el PSOE en su programa electoral, pero ha acusado a UPN de haberse querido adelantar al PP para mostrar "la radicalización de su postura". Jordi Jané, por CiU, ha señalado la libertad de votos para sus diputados en relación con esta moción y ha añadido que argumentarán sus posturas solo cuando tenga lugar la tramitación. Asimismo, UPyD ha explicado que se abstenía porque se debe conseguir que el Parlamento cumpla con su función de "mejorar las leyes de acuerdo con la Constitución y reforzar el consenso social y político". La Iglesia pide coherencia La Conferencia Episcopal Española (CEE), por su parte, ha advertido que "de acuerdo con la doctrina de la Iglesia, ningún católico coherente con su fe podrá aprobar ni dar su voto" a este anteproyecto de Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo presentado por el Gobierno. Según la CEE, el anteproyecto "constituye un serio retroceso respecto a la actual legislación despenalizadora y en la protección de la vida", y denuncian, entre otros aspectos, que "otorga la calificación de derecho a algo que, en realidad, es un atentado" contra la vida. Los obispos, en respuesta a los que piensan que durante un tiempo "el ser vivo producto de la fecundación humana no sería un ser humano", dicen que "es muy duro reconocer que el fruto de la fecundación es un ser humano", ya que hacerlo y defender a la vez el aborto sería "reconocer que hay un derecho a matar un inocente". Además, la CEE afirma que "el Estado no puede imponer ninguna moral a todos, ni una supuestamente mayoritaria, ni la católica, ni ninguna otra" ya que "la injusta imposición de una determinada concepción del ser humano a toda la sociedad por medio del sistema educativo no podrá dar frutos buenos".