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ETA

El Supremo remata el ‘caso Ekin’ y absuelve a 9 de los acusados

Por Carmen RodrigoTiempo de lectura3 min
España29-05-2009

El sumario 18/98 que el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, abrió hace más de diez años para procesar al aparato político de ETA obtuvo su punto y final con el recurso que resolvió el Tribunal Supremo. Los principales imputados del proceso han visto rebajadas sus penas considerablemente y 9 han quedado absueltos.

Destaca el caso de José Luis Elkoro, principal condenado por la Audiencia Nacional a 24 años de prisión. El alto tribunal ha rebajado su pena a 8 años al sustituir el delito de integración en organización terrorista por el de colaboración con organización terrorista. Los 9 absueltos son: los supuestos miembros de Ekin Natale Landa, Alberto Frías, Olatz Altuna, Mikel Aznar, Mario Zubiaga y Fernando Olalde; el vocal del patronato de la Fundación Joxemi Zumalabe, Iñaki O¬Shea; el ex redactor jefe de Opinión del diario Egin, Sabino Ormazabal; y Miguel Ángel Zuloaga, condenado por diseñar el proyecto de desobediencia civil denominado Pitzu Euskal Herria. Todos habían sido condenados a penas de entre nueve y once años de prisión por integración en organización terrorista y, salvo una de ellas, todos estaban relacionados con dicho proyecto. El principal motivo de esta rebaja es que el Supremo no coincide en la proporcionalidad de las penas de la Audiencia Nacional. En la mayoría de los casos ha considerado que gran parte de los condenados por el delito de integración en ETA debían serlo por el de colaboración con banda terrorista. Además, para Elena Beloki, Vicente Askasibar, Carlos Trenor, Juan María Mendizabal, Segundo Ibarra y José María Olarra, el Supremo ha anulado la condición de dirigente de organización terrorista por el que la Audiencia Nacional les había condenado. Otro aspecto que el Supremo ha revocado es la declaración de ilicitud de Orain, la editora del periódico Egin. Mantiene, en cambio, la ilicitud de KAS, Ekin y XAKI (aparato internacional de ETA), organizaciones que la Audiencia Nacional considera como parte de las “entrañas” de la banda terrorista. La misma semana en que se resolvió el caso contra el aparato político de ETA, dos miembros de la banda terrorista concedieron una entrevista al periódico Gara. Afirmaron que ETA intentó atentar en tres ocasiones con misiles contra José María Aznar cuando era presidente, pero que fallaron en los intentos. También afirmaron que antes del verano ETA pondrá fin a un proceso interno “reflexivo y asambleario” cuya finalidad consiste en “fijar una estrategia político-armada eficaz”. Entrevista ETA En respuesta a estas declaraciones, el consejero de Interior del País Vasco, Rodolfo Ares, afirmó en una entrevista a Onda Cero que ETA “se encuentra más débil que nunca, y que están intentando reagrupar fuerzas en lo que hace referencia a la política, para evitar esa situación de marginalidad en la que están en estos momentos”. El mismo día en que Ares ofreció estas declaraciones, el etarra Iker Esparza Ortega era arrestado en París. El estado de ebriedad en que conducía un coche con matrícula falsificada que no pertenecía ni al departamento de París ni a ninguno próximo levantó la sospecha de la policía francesa, quien le detuvo para proceder a su identificación. Así descubrieron que portaba una pistola y 17 documentos de identidad falsificados. Pero éste no es el último titular que ha dado protagonismo a la banda terrorista esta semana. Once miembros del “aparato de información” de ETA pactaron con el fiscal una reducción de su pena y desobedecieron así las recomendaciones de los dirigentes de la banda respecto a aceptar conformidades en los juicios de terrorismo. Los procesados se conformaron con la petición del Fiscal de la pena de dos años por colaboración con banda terrorista y aceptaron los hechos que se les imputaban (pasar información a ETA sobre militares, policías nacionales y concejales del PSOE). Así evitan los 6 años de pena pedidos inicialmente y además optan a la sustitución de la pena que les libera de ir a prisión.