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ESTADOS UNIDOS

Sonia Sotomayor, "la viva imagen del sueño americano"

Por G. MartínezTiempo de lectura2 min
Internacional31-05-2009

Sonia Sotomayor (Nueva York, 1954), poco podía imaginar desde el piso de protección oficial del Bronx en el que se crió, que acabaría ocupando portadas y siendo el eje del epicentro mediático que atraviesa actualmente Estados Unidos. ¿La razón? Su candidatura para juez del Tribunal Supremo, anunciada por Barack Obama tras conocerse la retirada del juez progresista, nombrado por George Bush padre en 1990, David Souter.

Huérfana de padre a edad temprana y criada por su madre enfermera, junto a su hermano en el barrio del Bronx; Sotomayor consiguió estudiar en escuelas privadas y, gracias a unas becas, se licenció summa cum laude por la Universidad de Princeton y después, consiguió su título como abogada en Yale. Comenzó su carrera profesional como ayudante del fiscal de Manhattan, pasándose después al sector privado, hasta que en 1991 el ex presidente George Bush la postuló para el Tribunal del Distrito del sur de Nueva York, convirtiéndose así en la juez más joven y la primera hispana del Estado en ostentar ese cargo. En 1997 fue elegida por Bill Clinton para juez federal del Tribunal de Apelaciones neoyorquino, pero los republicanos frenaron su candidatura durante un año. Aunque su ratificación en el puesto está todavía pendiente, parece que la juez Sotomayor, y por ende el presidente Obama, no encontrará muchos obstáculos porque el Partido Demócrata cuenta con una amplía mayoría, 59 escaños contra 41, en el Senado. Según analistas políticos estadounidenses, los republicanos "tienen las manos atadas" en este asunto, ya que si normalmente se repasa tanto la trayectoria como la vida personal de los candidatos, un ataque directo hacía Sotomayor perjudicaría sobremanera la imagen republicana ante el electorado de origen hispano, que conforma junto con los afroamericanos, una de las minorías étnicas más importantes de Estados Unidos y con gran peso demográfico en estados clave como Florida. Por ello, Barack Obama es blanco de las críticas de algunos conservadores, quienes ven en el nombramiento de la juez Sotomayor una elección basada no en los méritos de la jurista, sino en su identidad. Sin embargo, el presidente da así un paso más en su particular revolución política, y la elección de una mujer latina para un cargo de carácter vitalicio, y tal importancia, refuerza aún más el espíritu conciliador de su lema decampaña: "Yes, we can".