DISCAPACIDAD

La igualdad, el nuevo reto para los deficientes visuales

Por Tamara Santos2 min

Sociedad18-04-2009

Como decía una vieja canción "el mundo gira y todos dentro de él". Este es precisamente el principal problema para quienes tienen deficiencia visual y a su vez su principal deseo, moverse y hacerlo de manera independiente. Hacer actividades de casa, el cuidado personal, salir a la calle; cosas tan cotidianas como estas se hacen un mundo para quienes tienen ceguera.

La ceguera es la pérdida completa o parcial del sentido de la vista, y afecta a 161 millones de personas en el mundo según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Tal y como dice la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), en necesario facilitar a estas personas su independencia y ayudarlas para adaptarse a su pérdida visual. Organizaciones como la ONCE realizan actividades para ayudar a estos colectivos en su integración sociolaboral. La rehabilitación integral, por ejemplo, permite que la persona pueda volver a realizar sus tareas cotidianas. Los perros guía hacen posible el desplazamiento fuera del hogar. Estos animales son adiestrados y entrenados antes y durante su servicio. Pero sin lugar a dudas, el sistema de escritura y lectura braille ha sido fundamental para la comunicación de estas personas que cada vez se sienten más integradas gracias a ello. Por eso se celebra con especial alegría en este año 2009, el bicentenario nacimiento de este autor, Louis Braille, recordando a su vez el gran descubrimiento que aportó. Estos son algunos de los muchos servicios que emergen para apoyar a los discapacitados visuales con el fin de eliminar las barreras que condicionan su independencia. El trabajo también supone un gran reto en este colectivo, sin embargo, con el paso de los años los resultados son cada vez más positivos. Mientras que en un principio se pensaba que los ciegos no podían trabajar o en el mejor de los casos, podían hacerlo en muy pocos oficios, actualmente la situación es bien distinta. Hoy en día, se puede decir que estas personas tienen recursos, apoyos y la administración suficiente como para poder realizar un gran número de trabajos. En consecuencia, el objetivo ahora es que los deficientes visuales tengan las mismas oportunidades de acceso al trabajo que el resto de personas. Esta razón lleva a organizaciones como la mencionada ONCE, a facilitar una buena educación, estudiar el mercado laboral, aprovechar los recursos, eliminar barreras comunicacionales o mejorar las tecnologías, con el fin de que cada vez haya una mayor igualdad en este ámbito.