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MOTOCICLISMO

La lluvia arrebata el protagonismo a los pilotos en el inicio del Mundial

Por LaSemana.esTiempo de lectura3 min
Deportes12-04-2009

Los pilotos miraban al cielo y apenas podían creerse que estuviese diluviando en el desierto. La lluvia marcó la disputa del Gran Premio de Qatar en todas sus categorías: provocó que se aplazara un día la de MotoGP, redujo a 13 vueltas la de 250 c.c. y convirtió la del octavo de litro en la más corta de la historia (sólo cuatro giros). Entre tal caos, los primeros vencedores fueron Casey Stoner, Héctor Barberá y Andrea Iannone.

MotoGP Había prometido que esta temporada iba a ser agresivo de principio a fin y cumplió con su palabra. Casey Stoner mandó en el primer Gran Premio del año de principio a fin. El australiano demostró durante todo el fin de semana que su Ducati era la más rápida en el circuito de Qatar, lo constató al lograr la pole y lo refrendó en una salida espectacular. Tras cinco vueltas ya estaba claro que nadie iba a poder alcanzarle. Sólo Valentino Rossi intentó darle caza, pero fue incapaz. Bastante tuvo con contener a un Jorge Lorenzo lanzado desde el principio, que dio mucha guerra a su compañero de equipo y le presionó hasta los últimos giros, en los que hubo de conformarse con el tercer puesto. Le siguieron, más distanciados, Colin Edwars y Andrea Dovizioso, cuarto y quinto respectivamente. Daniel Pedrosa, que salía desde la quinta línea de la parrilla, peleaba por el sexto puesto cuando Alex de Angelis le tocó y estuvo a punto de irse al suelo. A partir de ahí el español perdió posiciones hasta acabar undécimo. Además, Toni Elías fue noveno y Sete Gibernau, décimo tercero. 250 c.c. En el cuarto de litro, Álvaro Bautista, que había sido el más rápido en los entrenamientos, no estuvo demasiado afortunado en la salida y perdió algunas posiciones mientras que otro español, Héctor Barberá, se colocaba al frente de la prueba desde el primer momento. Le siguieron el húngaro Gabor Talmacsi, y los españoles Alex Debón y Héctor Faubel, entre otros. Debón logró situarse primero durante unos instantes, pero un trallazo le hizo soltar el acelerador y verse superado por sus rivales, hasta finalizar decimocuarto. Fuera de juego Debón, Barberá se colocó en cabeza, si bien el francés Jules Cluzel, un auténtico desconocido en estas lides, decidió atacar para probar suerte y rodó al frente de la prueba durante cuatro giros. Pero Barberá le superó antes de que la lluvia volviese a jugarles una mala pasada. Venció, por delante de Cluzel y Mike di Meglio, mientras que Bautista fue séptimo en una carrera de sólo 13 vueltas por la amenaza de lluvía. 125 c.c. Precisamente la lluvia decidió la primera carrera de la temporada en el octavo de litro. Cuando sólo se habían completado cuatro vueltas, comenzó a diluviar y la organización paró la prueba. Aunque el reglamento indica que deben completarse al menos dos tercios del recorrido, los responsables decidieron dar por válidas esas cuatro vueltas y repartir los puntos sin volver a poner en marcha los motores. Fue la carrera más corta de la historia y el afortunado de esta lotería fue Andrea Iannone, que marchaba primero cuando se detuvo todo. El italiano mandó desde el principio junto a Julián Simón, que fue segundo. Muy por detrás, en el grupo perseguidor, Sandro Cortese iba en cabeza cuando comenzó a llover, con lo que pudo subir al podio. Pol Espargaró fue cuarto y Nico Perol, séptimo. El joven Marc Márquez, que corría junto a los pilotos que peleaban por el tercer puesto, se fue al suelo en la tercera vuelta.