ASALTANTE DE MORENO

Policía, jueces y Guardia Civil se culpan por la liberación de Astrit Bushi

Por Esteban del Pozo4 min

España08-04-2009

La puesta en libertad por error del supuesto líder de la banda que en diciembre de 2007 asaltó la casa de José้ Luis Moreno, Astrit Bushi, es un “hecho gravísimo”, por lo que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado colaborarán con la Justicia para aclarar lo ocurrido y adoptar las medidas oportunas. Así de contundente se mostraba el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, respecto a la valoración que hacía sobre la puesta en libertad de este peligroso delincuente.

Bushi estaba encarcelado acusado de ser el presunto líder de la banda que asaltó la casa del humorista y empresario José้ Luis Moreno, pero aparte de esto se le reclamaba por otra veintena de robos con violencia. Fue despué้s de un traslado desde la cárcel a un juzgado de Alcobendas para declarar por otra causa lo que le permitió salir en libertad. En un comunicado, la Policía y la Guardia Civil, explican que en el auto que acordó la libertad provisional para el albanokosovar se notificó su declaración ante el juez en calidad de detenido y no de preso. Se trata de un matiz que varía el procedimiento a seguir con el detenido. Este mismo escrito apunta en las conclusiones preliminares de su investigación tras la puesta en libertad de Bushi, que el error “sólo fue posible por una suma de actuaciones erróneas y hechos anómalos que debe considerarse totalmente excepcional”. Rubalcaba aseguró que se trata de un “caso excepcional que no se produce en la práctica diaria del funcionamiento de la Justicia ni de las fuerzas de seguridad”. El ministro negó categóricamente que se pueda hablar de un episodio de “descoordinación” policial y judicial y resaltó que se trata de un "hecho gravísimo". Además recordó que “hay cientos de personas que salen de las prisiones para ir a declarar a los juzgados y que por la tarde volverán a la cárcel”. Una vez se conoció la noticia, la Guardia Civil y la Policía Nacional no tenían claro quién había dado la llave de la libertad a este delincuente. Según el informe del comisario de Alcobendas, "no se hizo ninguna diligencia de recepción y entrega por no haber sido informados de que este acusado era un preso", y no un simple detenido. El mando policial asegura que los agentes entendieron que se trataba "de un delincuente común y que, una vez dictada orden de libertad por el juzgado, se procedió a ejecutarla". Sin embargo, la Guardia Civil responde que, un día antes de que Bushi fuera trasladado a los juzgados de Alcobendas, se remitió un fax a la comisaría, avisando de que el preso iba a ser llevado a declarar. En el mismo fax se les solicitaba que se les avisara en cuanto finalizase la diligencia judicial, para poder volverlo a llevar cuanto antes a la cárcel. Por su parte, desde el ámbito judicial el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) también inició una investigación interna para determinar las posibles responsabilidades del juez. En rueda de prensa, el presidente del TSJM, Francisco Javier Vieira, anunció que dicha investigación interna había sido archivada sin que de ella se dedujese que el magistrado había incurrido en ningún error. Explicó que el auto por el que el juez decretaba la libertad del preso afectaba sólo a la causa por la que había ido a prestar declaración. Asimismo, culpó a los policías encargados de su custodia por no haber puesto al preso a disposición de la Guardia Civil para que se le condujese de vuelta a la prisión de Valdemoro (Madrid) en la que cumple prisión preventiva por otros delitos. Vieria fue más allá incluso al apuntar a que la actuación de los agentes podría ser constitutiva de un delito de infidelidad en la custodia de presos. Respuesta de Interior Tras estas explicaciones, la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil emitió un comunicado en el que replicaba que el juez notificó a la policía el auto de libertad en lugar de hacerlo a la cárcel, procedimiento habitual. La liberación de Bushi no fue la única que se produjo en relación a la misma banda de delincuentes. Otro de sus miembros fue liberado por error el pasado 18 de marzo, aunque la Policíํa pudo recuperar su pista y devolverlo a prisión tres díํas después้s. Su nombre es Alejandro Deba y al igual que Bushi se encontraba en prisión provisional en la cárcel de Estremera pendiente de varios juicios. Un dํía acudió a declarar a los juzgados de Valdemoro por otro asalto. Tras las diligencias judiciales, siguiendo el habitual procedimiento, fue devuelto al mismo centro penitenciario por la Guardia Civil. Poco después, el director de la prisión recibió una comunicación vía fax de los juzgados de Valdemoro en la que se le informaba de que Deba había quedado en libertad por esa causa. Se trata de lo habitual en casos de presos con varios procedimientos abiertos. Pero la prisión, tras recibir ese auto, decidió poner al sospechoso en libertad y Deba abandonó la cárcel madrileña ese mismo día. Por error, porque en otras muchas causas su situación penitenciaria era la de preso preventivo.