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TEATRO

El escenario del Teatro Español despide a Adolfo Marsillach

Por Tamara BerbésTiempo de lectura2 min
Cultura21-01-2002

En la soledad de su casa perdió la vida, el pasado día 20, Adolfo Marsillach, a los 73 años, tras una larga enfermedad. El Teatro Español se vistió de luto para acoger al mejor reparto de su historia que no podía dejarle marchar sin una despedida como él se merecía y en el lugar más apropiado: sobre las tablas de un escenario.

Nuria Espert, Inmanol Arias, Luis Merlo, Paloma Cela, Juan Echanove, Cayetana GuillénCuervo, Silvia Marsó y el director José Tamayo, entre otros, acompañaron a sus hijas y a Mercedes Lezcano, el gran amor de su vida, durante estos duros momentos. La salida del féretro se produjo, entre una gran ovación de más de cinco minutos, poco después de que su viuda recogiera, de manos del alcalde José María Álvarez del Manzano, la Medalla al Mérito Artístico del Ayuntamiento de Madrid, y antes de que se dirigieran al crematorio de La Almudena, donde fue incinerado. Marsillach estudió la carrera de Derecho pero nunca llegó a ejercer. Entre micrófonos y platós de televisión comenzaron sus pasos como actor y de la mano de Jaime de Armiñán empezó a dirigir y a escribir guiones para la pequeña pantalla. Su producción teatral se caracteriza por su ingenio, ironía y diversión que plasmó en obras como Yo me bajo en la próxima ¿y usted?. Su próximo proyecto era volver a los escenarios con una obra en catalán. Entre las declaraciones de amigos y conocidos no faltaron gestos de cariño y recuerdos entrañables de los que fueron sus compañeros dentro y fuera del escenario. Marsillach fue un hombre que hizo mucho por la cultura en este país, que empujó el teatro español hacía arriba con la Compañía Nacional de Teatro Clásico, sin dejar nunca de dar la cara frente a problemas políticos y sociales. Socialista convencido, siempre apoyó a "su" partido. El actual líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, también acudió a darle su último adiós, acompañado por Alfonso Guerra. "Era un hombre muy comprometido con las ideas del progreso y de la izquierda, de una manera muy evidente, y por eso nuestro testimonio y agradecimiento ha sido muy intenso a toda su familia", declaró Zapatero. La actriz Amparo Rivelles explicó: "Ante todo, él era el teatro". Sus cenizas serán esparcidas en algún lugar del mar Mediterráneo por deseo expreso del actor. Sólo el mar podrá contar ahora con su sabiduría y su arte.