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FINANZAS

Las cajas de ahorros, ¬en pie de guerra¬

Por LaSemana.esTiempo de lectura2 min
Economía15-03-2009

Caja España se apuntó la semana pasada a la moda de las fusiones. En un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Consejo de la entidad castellana ha facultado a su presidente y al comité directivo a “impulsar procesos que conduzcan a un modelo a las Cajas de Castilla y León bajo la fórmula que sea más eficiente”.

Si se produce esta fusión, Caja España sería la undécima caja de ahorros española con unos activos de 25.000 millones de euros tras su posible participación en un eventual proceso de integración con las seis cajas de Castilla y León. El pasado 10 de marzo, Caja Duero adoptó un acuerdo similar, instando a sus principales ejecutivos a iniciar conversaciones con las demás cajas de ahorros de la región. Las seis cajas de Castilla y León echaron atrás el pasado febrero el protocolo para su integración en una corporación, una iniciativa que el presidente de la Confederación bautizó como “fusión virtual”, pactado entre los partidos políticos (PSOE y PP), y agentes económicos y sociales de la comunidad. Además de Caja España y Caja Duero, Caja de Burgos, Caja Segovia y Caja Ávila rechazaron someter esa opción a sus órganos de gobierno. Sólo Cajacírculo había llevado ya el protocolo a debate en su consejo de administración. Las entidades asumieron entonces el compromiso de reforzar la solvencia del sistema financiero regional. Por eso se habla ahora de avanzar hacia un modelo distinto, que profundizará en la integración, pero que seguramente dejará al margen a alguna de las entidades. El consejero de Presidencia y portavoz de la Junta de Castilla León, Antonio de Santiago-Juárez López, dijo el jueves que era el momento de actuar ante la caída de los beneficios. “Es el momento de tomar decisiones y más cuando hemos conocido los datos, ha habido un desplome del beneficio de las cajas, es el momento de tomar decisiones y se están tomando afortunadamente”, explicó el portavoz. El beneficio atribuible del conjunto de las cajas se redujo en 2008 casi un 39 por ciento a 6.829,1 millones debido sobre todo a las mayores dotaciones, aunque ninguna de las entidades entró en pérdidas. Por su parte, Caja Madrid tampoco pasa por uno de sus mejores momentos. Esta semana la entidad vivirá nuevas jornadas de reuniones entre el Consejo de Administración y una comisión de control para llegar a un acuerdo sobre el futuro de la entidad. El Consejo de Administración se reunirá con un solo punto en el orden del día: “Acuerdo sobre el contenido de los Estatutos y Reglamento de Caja Madrid”, que tiene por fin subrayar que la votación por unanimidad de estos textos en la última sesión se produjo “por imperativo legal”, pero catorce de los 21 miembros de la dirección están en contra del fondo de los nuevos Estatutos reformados respecto a la Ley de Cajas de Aguirre.