Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

CONSUMO

Las eléctricas culpan a Industria de la subida de la luz

Por LaSemana.esTiempo de lectura2 min
Economía08-02-2009

En junio de 2008, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, tuvo una ocurrencia y decidió pasar de bimensual a mensual el recibo de la luz. Ésta iba a ser una medida a favor de los usuarios. Su intención era que los ciudadanos tuvieran conciencia de la energía que gastan o malgastan y repartir su pago cada mes, al igual que sucede con otros servicios.

Así que, el Ministerio le pasó a las eléctricas el encargo, permitiendo que la lectura real siguiera siendo cada dos meses y que los meses intermedios se realizara una facturación estimada. Las compañías, por su parte, se negaron a asumir un incremento de los costes y las obligadas modificaciones informáticas y de gestión. Las eléctricas apuntan que la facturación mensual supone un encarecimiento de sus costes de 100 millones de euros al año. Las eléctricas niegan rotundamente que estén “estafando” o “engañando” a los clientes y sólo admiten la existencia de algunos errores “habituales cuando se emiten 20 millones de facturas cada mes”. Iberdrola, por ejemplo, ha hecho estos días un muestreo y ha revisado 700.000 facturas “sin encontrar un fallo”. Finalmente, la medida que afecta a más de 20 millones de personas ha sido todo un fracaso y ha provocado el malestar en el sector eléctrico, empresas y usuarios. La Comisión Nacional de Energía (CNE) y varias comunidades autónomas están investigando las reclamaciones y quejas presentadas por cientos de usuarios en toda España, que se sienten supuestamente engañados en las facturas que están recibiendo. Las quejas de los consumidores se refieren sobre todo a que desde enero están recibiendo recibos de luz con consumos muy elevados a los que se les han aplicado los nuevos precios, más caros, producto de unas facturaciones estimadas a la baja en diciembre, cuando las tarifas eran más baratas. Las compañías niegan la existencia de esa supuesta práctica y subrayan varias cuestiones que han podido influir en que los recibos que están enviándose sean notoriamente caros. Por un lado, este invierno está siendo más frío que el del año pasado, por lo que el consumo aumenta. Por otro, Industria subió el 1 de enero el precio de la electricidad entre un 4,15 por ciento y un 5,23 por ciento para la mayoría de los consumidores domésticos.