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TERRORISMO

ETA despide su año aciago con un atentado contra la prensa en Bilbao

Por Eduardo AguirreTiempo de lectura2 min
España02-01-2009

Pasaban unos minutos de las once de la mañana del miércoles 31 de diciembre y la banda terrorista ETA quería despedir su peor año con un coche bomba, al igual que en 2006 cuando la banda atentó contra el aparcamiento de la T-4 en Barajas (Madrid) y causó dos muertos. Esta vez no hubo muertos, pero si cuantiosos daños materiales contra la sede de EiTB, un herido leve y un trabajador de Antena 3 al que la explosión le afectó un tímpano. Horas más tarde fue localizado en un monte cercano el dueño del vehículo, los etarras le habían atado a un árbol y cargaron su coche con unos 100 kilos de explosivos.

La fachada del edificio afectado, formado por cristaleras que se vinieron abajo, quedó destrozada, pero los bomberos habían desalojado el edificio una hora antes de que esto ocurriera. Una llamada anónima en nombre de la banda terrorista ETA, avisó de la colocación del coche bomba. La voz anónima era una grabación distorsionada. La furgoneta colocada por los etarras estaba justo debajo de la redacción de EiTB. Cuando los trabajadores volvieron, pudieron comprobar ellos mismos los destrozos causados por el atentado. Las zonas más afectadas fueron la redacción digital y el comedor de la empresa. No obstante, pudieron montar el informativo en vasco a las 14.00 horas y en castellano una hora después, la radio pública vasca tampoco tuvo dificultades para seguir emitiendo su programación habitual. Éste es el segundo ataque de la banda terrorista a la prensa en el año 2008. El 8 de junio pasado, una mochila cargada de amonal hizo un agujero de cuarenta metros cuadrados en los talleres del diario El Correo en el polígono de Torrelarregitia de la localidad vizcaína de Zamudio. Los terroristas fracasaron en el primer intento de robar una furgoneta para utilizarla de coche bomba. Todo ocurrió sobre las 8.30 horas de la mañana del propio día del atentado. Tres etarras intentaron apoderarse de una furgoneta conducida por una mujer en Buyagoitia, en la localidad vizcaína de Arrigorriaga. Los terroristas hicieron indicaciones a la mujer para que se detuviera, se colocaron delante, pero la conductora se negó y no paró su vehículo. Uno de los terroristas llegó a encaramarse al vehículo y acabó atropellado. La mujer logró escapar y evitar el robo. No tuvo la misma suerte el propietario del segundo y definitivo vehículo que consiguió robar ETA. El coche robado era una furgoneta Citroën Jumpy y con matrícula BI-6008-CU. La llamada anónima avisando de la colocación de la bomba, también advirtió de que en una zona en el monte de la localidad de Arrigorriaga, se encontraba un hombre atado a un árbol. Fuentes de la lucha antiterrorista han confirmado que fue localizada una persona en este lugar en las condiciones descritas por el supuesto portavoz de ETA y que se trataba del propietario del vehículo. Por otro lado, las declaraciones de condena del atentado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero no tardaron en llegar. El jefe del Ejecutivo, durante un acto en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), afirmó que ”ETA podrá atentar, pero va a perder todas las batallas". "Lo único que ETA va a conseguir es que los terroristas estén más pronto en la cárcel, que es donde tienen que estar". Por su parte el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, condenó el atentado de ETA asegurando que "con la unidad de los demócratas, la sociedad española derrotará a ETA".