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CRISIS SOCIALISTA

La fórmula del Gobierno sobre la financiación catalana no convence al PSC

Por LaSemana.esTiempo de lectura2 min
España31-08-2008

Ha sido una de las polémicas del verano. El PSC mantiene la rebelión contra su propio partido, el PSOE, y el Gobierno en relación a la financiación catalana. Denuncian que el Ejecutivo socialista no está cumpliendo con lo pactado en el Estatut sobre esta materia y no convencen a esta formación las soluciones propuestas recientemente por el vicepresidente Económico, Pedro Solbes.

“Con ese música no habrá canción”. Con esta metáfora se manifestó al inicio de este conflicto el partido que gobierna en la Generalitat de Cataluña en coalición con ERC e ICV, abanderando esta reivindicación que ellos han calificado como “educadamente crítica y firme" de lo pactado en el Estatut y avisan de que el “tono” y la “exposición” de Solbes “no ayudan a llegar a acuerdos”, tal y como expresó el secretario general de los socialistas catalanes, José Zaragoza. El vicepresidente económico del Gobierno, compareció en el Congreso de los Diputados para asegurar que "la ausencia de un acuerdo" no puede ser considerado "un incumplimiento" por parte del Gobierno y defendió que el Ejecutivo está realizando un esfuerzo "para que sea posible cuanto antes" y que ninguna comunidad quede perjudicada. Asimismo, Solbes sentenció que, en caso de que se alargue el desacuerdo, se impondrá el criterio del Gobierno. Estas palabras no gustaron a la persona que, desde el principio, ha encabezado la reivindicación sobre el nuevo modelo de financiación para Cataluña, el propio presidente de la Generalitat, el socialista José Montilla, quien criticó las “imposiciones” del Gobierno. "No aceptaremos un mal acuerdo, no nos levantaremos de la mesa, pero tampoco aceptaremos ninguna imposición”, indicó Montilla, quien añadió que “no se puede responder con imposiciones a las razones de Cataluña”. “No se puede hacer y no dejaremos que se haga", aseveró. Un paso más allá fue el vicepresidente de ERC, Josep Lluis Carod Rovira, quien llegó a indicar que es el momento de decidir si conviene seguir en España al denunciar que “Cataluña está cansada de ser la fábrica de impuestos de España”. “Cataluña no está dispuesta a aceptar más imposiciones, no es una ONG solidaria sino un país que tiene necesidades sociales y objetivos de modernización”, insistió. Por su parte, desde el PP, su líder, Mariano Rajoy, ahondó aun más en la llaga de los socialistas al anunciar que solicitarán la comparencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Congreso de los Diputados para que explique “por qué se abrió el debate sobre la financiación sin saber cual será su final”. Según los el presidente de los populares, esta cuestión debe resolverse “por unanimidad y con el acuerdo de todas las autonomías” ya que, según dijo, “esta es la única garantía de que habrá igualdad entre todos los españoles”.